Desvelando el misterio del gluten: ¿Es un enemigo o un compañero de viaje en nuestra dieta?

Desvelando el misterio del gluten: ¿Es un enemigo o un compañero de viaje en nuestra dieta?

El gluten, una proteína presente en cereales como el trigo, la cebada y la avena, ha generado gran polémica en el ámbito de la nutrición en los últimos años. Mientras algunos lo consideran un enemigo para la salud, otros lo ven como un compañero de viaje inocuo en nuestra dieta. Sin embargo, la realidad es que muchas personas siguen sin entender del todo qué es el gluten y cómo afecta a nuestro organismo. En este artículo, desvelaremos el misterio que rodea a esta proteína y exploraremos las verdaderas implicaciones de su consumo en nuestra salud.

Descubre el verdadero papel del gluten en nuestra dieta: amigo o enemigo?

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El gluten es una proteína que se encuentra de forma natural en muchos alimentos nutritivos, en especial en la semilla de cereales, como el trigo, el centeno y la cebada y sus híbridos como la espelta y el triticale. También está presente en algunas variedades de avena. El gluten está conformado por una familia de proteínas de almacenamiento, conocidas como prolaminas. Estas son las gliadinas y las gluteninas, y ambas ayudan a cumplir su función en las masas de la harina, que es darles la elasticidad, explica el Centro Médico-Quirúrgico de Enfermedades Digestivas (CMED).

La sensibilidad a esta proteína no solo se relaciona con problemas gastrointestinales, sino que puede estar asociado a otros trastornos en la salud. De ahí el boom de las dietas libres de gluten no solo en personas con intolerancia a esta proteína. Entonces nos preguntamos: ¿Es o no es malo el gluten que tanta gente lo ha empezado a dejar de lado? En este artículo encontrarás la respuesta definitiva.

Dónde se encuentra el gluten

Es muy fácil de saber los alimentos básicos que contiene gluten, simplemente debemos de memorizar estas iniciales “TACC”, que significan:

Trigo

Avena, aunque esta no contiene por sí sola gluten, pero en varios países se cultiva muy cerca del mismo, por lo que hay altas probabilidades de que haya contaminación cruzada.

Cebada

Centeno

Aunque no debemos de fiarnos de esto solo, pues hay muchos alimentos que, aunque no lo parezca, pueden o contienen gluten, como las golosinas, las bebidas destiladas o fermentadas, los embutidos, las salsas, los colorantes alimenticios, los quesos y los frutos secos. También lo contienen algunos medicamentos y las comidas ya preparadas, puesto que, generalmente, los restaurantes, ya sean de comida rápida o no, no poseen condiciones aptas para cocinar o menús sin TACC.

¿Es o no es malo el gluten?

Por sí solo, el gluten es únicamente una proteína, no puede clasificarse como buena o mala, pero una realidad presente es que cada vez menos personas la pueden digerir de forma correcta. No se puede culpar del todo al gluten del aumento contra su tolerancia, pues la misma se vincula más a la expansión de alimentos procesados y/o intervenidos que dañan al ser humano lentamente. Eso explicaría también el aumento exagerado de las enfermedades gastrointestinales a nivel mundial.

Aunque es cierto que el gluten contiene unos péptidos tóxicos demasiado grandes para ser absorbidos correctamente a través del intestino delgado. El cuerpo no tiene las enzimas necesarias para digerirlo completamente y son esos pequeños pedazos no digeridos los que pueden provocar problemas intestinales”, explica el CMED.

¿Qué nos hace mala digestión del gluten?

No se deben ignorar las dietas sin TACC, pues ingerir el gluten puede llegar a ser muy agresivo porque “penetra no solo en el intestino, sino al cerebro, lo que le permite que otras proteínas entren al torrente sanguíneo también”, según afirman en Baptist Health. Por lo tanto, cuando el gluten está en contacto con la mucosa intestinal, puede cambiar el metabolismo.

Estos son los síntomas de una mala digestión de gluten:

Diarrea o estreñimiento

Problemas en la piel

Dolores de cabeza

Lupus

Problemas de peso

Depresión

Artritis reumatoidea

Tiroiditis

Fatiga

Ataxia

Diabetes

Como el gluten afecta el sistema inmunológico, favorece la autoinmunidad y la inflamación, por eso se puede ver reflejado en síntomas externos al aparato gastrointestinal.

Esta información no sustituye en ningún caso al diagnóstico o prescripción por parte de un médico. Es importante acudir a un especialista cuando se presenten síntomas en caso de enfermedad y nunca automedicarse.