La investigación titulada ¿La leche de cabra influyó en que los canarios fueran los más altos de España hasta 1936? plantea un interesante debate sobre los factores que pudieron haber contribuido a la estatura de los habitantes de las Islas Canarias hasta mediados del siglo XX. Según el estudio, la ingesta de leche de cabra podría haber desempeñado un papel crucial en el desarrollo físico de la población canaria, siendo posiblemente un elemento diferenciador que los llevó a destacar como los más altos de España en aquel periodo. Estos hallazgos abren nuevas perspectivas sobre la influencia de la alimentación en la estatura de las poblaciones y su impacto en la historia antropométrica de la región.
La influencia de la leche de cabra en la estatura canaria
Desde finales del siglo XIX hasta principios del XX, los hombres adultos de Canarias alcanzaron alturas excepcionales, superando a las poblaciones más desarrolladas del mundo. En 1934, la talla media en las islas llegó a los 167,4 centímetros, por encima del promedio español de 164,5.
El director de la Cátedra Cajasiete de Economía Social y Cooperativa de la Universidad de La Laguna, Cándido Román-Cervantes, destaca que los mozos canarios tenían tallas equiparables a las de poblaciones como Canadá, Holanda y País Vasco, y un elemento clave fue la presencia de leche de cabra en las islas, ante la ausencia de leche de vaca.
Este fenómeno ha sido objeto de un proyecto de investigación en antropometría histórica a nivel nacional, en el que participan diversas universidades de España y que se extenderá hasta 2025. Los datos recopilados revelan que antes de la Guerra Civil, los canarios superaban en altura a la media peninsular, con una diferencia significativa de 167,4 cm frente a 164,5 cm.
El estudio, financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, analizó estaturas masculinas de 6.333 individuos entre 1880 y 1936, estandarizadas a edades entre 18 y 20 años. Se destacó que la lejanía, la escasez de recursos nutricionales y la endogamia en El Hierro afectaron el crecimiento en altura en esa zona.
Los investigadores coinciden en que la estatura adulta masculina en Canarias durante el periodo de transición nutricional del siglo XIX al XX fue excepcional, atribuyendo este hecho a factores medioambientales como el clima benigno, la exposición al sol y una alimentación diversificada.
En comparación con otras regiones de España, los canarios mantuvieron una prima de altura a lo largo del siglo XX, siendo la más alta registrada en reclutas entre 1858 y 1915-29, con una media de 165 centímetros. Se destaca que, a pesar de los altibajos, se observó un progreso significativo en las estaturas insulares.
El estudio reveló diferencias en las alturas según las regiones de las islas, siendo las poblaciones occidentales las de mayor estatura promedio. La población de San Bartolomé se destacó por presentar tallas más bajas, marcando una diferencia significativa con otras zonas.
La hipótesis principal se centra en el impacto del medio ambiente en el desarrollo de la estatura canaria, sugiriendo que factores como la alimentación diversa y el clima favorecieron el crecimiento. Se espera que los datos de El Hierro aporten nuevos hallazgos, posiblemente relacionados con la lejanía y la escasez de recursos nutricionales en esa región.
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