En un hecho inusual que ha sorprendido a muchos, un cliente experimentó una experiencia poética inesperada al solicitar una copa de vino en un restaurante. Tras finalizar su comida y solicitar la cuenta, en lugar de un recibo común y corriente, el cliente se encontró con un poema impreso en el ticket. La peculiaridad de la situación dejó atónito al comensal, quien compartió la curiosa anécdota en redes sociales, volviéndose viral en cuestión de horas. La mezcla entre gastronomía y literatura en este singular gesto del establecimiento ha despertado el interés y la admiración de muchos, resaltando la importancia de la creatividad y la originalidad en la experiencia del cliente. Sin duda, esta inusual forma de despedir a los comensales ha dejado una huella imborrable en la memoria de este cliente afortunado.
Cliente sorprendido al encontrar poesía en ticket tras quejarse del vino en restaurante
Cuando disponemos del tiempo y el dinero necesario para hacerlo, no es extraño acudir a bares y restaurantes para disfrutar de una comida, una cena o simplemente un momento para tomar algo en familia y con nuestros amigos. Son estos pequeños momentos de paz los que nos ayudan a escapar, aunque sea un rato, de la rutina, para despejarnos.
Imagen de recurso de un camarero en un bar de Sevilla.
Sin embargo, lo cierto es que, si tenemos esa mala pata, es posible que ni así nos libremos de algún que otro enfado o momento de tensión, da igual si es con los camareros o con los comensales de la mesa de al lado. Estas situaciones son un verdadero fastidio si eres tú quien está implicado, pero pueden convertirse en un fenómeno viral en redes para quienes son solo meros espectadores.
Eso es exactamente lo que ha ocurrido con lo que le pasó a un cliente en un restaurante mexicano. En concreto, uno ubicado en el estado de Chiapas. Y es que, aunque el cliente en cuestión a priori solo pretendía disfrutar de una copa de vino, lo cierto es que lo que se puede leer en el ticket del pedido no tiene desperdicio.
Es nada extraño que un cliente se queje de lo servido si así lo considera oportuno. En esta ocasión, parece que el estado del vino no era el que el comensal esperaba. Así mismo se lo expresó al camarero. Lejos de acatar órdenes y cumplir con la máxima de 'el cliente siempre tiene la razón', el camarero no dudó en responder. Y lo hizo en el ticket.
Dice el cliente que está muy feo el vino. Yo le dije que feo está él, se podía leer al final del ticket, un ticket que nunca llegó a su destinatario porque el pedido quedó cancelado por el gerente del restaurante. Sin embargo, sí cruzó el 'umbral digital' y acabó haciéndose viral en redes. Todo ello después de que el perfil de Twitter @soycamarero lo compartiera hace unos días.
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