Tamberi y Barshim vivencian otro instantáneo de historia en los Juegos Olímpicos
En un sorprendente giro de eventos, los atletas italianos Gianmarco Tamberi y mutaz Essa Barshim han logrado un nuevo hito en la historia de los Juegos Olímpicos, al compartir la medalla de oro en salto de altura en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Esta histórica decisión ha generado un gran revuelo en el mundo del atletismo, ya que por primera vez en la historia de los Juegos Olímpicos, dos atletas comparten el título de campeón olímpico en una misma prueba. Una demostración de Fair Play y deportividad que dejará un legado en la memoria de los fanáticos del atletismo.
Tamberi y Barshim, un duelo de corazón y pericia en la clasificación parisiense
La imagen de Gianmarco Tamberi y Mutaz Essa Barshim decidiendo compartir el oro en salto de altura en Tokio 2020 sigue viva en el recuerdo de todos. No dudaron cuando los jueces se lo propusieron y ambos se convirtieron en campeones olímpicos y subieron a lo más alto del podio.
Un reencuentro emocionante en la clasificación de París, con el objetivo de ganarse el pase para la final y aspirar así a revalidar su título olímpico. Ambos consiguieron su objetivo y lucharán de nuevo por el oro olímpico, pero tuvieron que sufrir para lograrlo.
Gianmarco Tamberi demostró no estar a su mejor nivel, lastrado por los problemas de salud que le llevaron a estar hospitalizado a finales de la semana pasada. No merezco todo esto, hice todo por estos Juegos Olímpicos, todo, escribió el italiano en un mensaje en sus redes sociales. Finalmente Tamberi sí pudo estar en el Stade de France y con 2,24 será uno de los doce atletas que estará en la final.
Mutaz Barshim también logró la clasificación de forma milagrosa. En el primer intento para superar los 2,27, el catarí notó una molestia en el sóleo que le obligó a interrumpir la carrera. Barshim se fue directamente al suelo y se llevó la mano a su pierna izquierda.
Un gesto de compañerismo que conmovió a todos en el Stade de France. El primero en aparecer para asistir a su compañero fue Tamberi, que se interesó por su estado y le ayudó a estirar para tratar de aliviar las molestias.
Una muestra de compañerismo y deportividad que provocó los aplausos de todo el Stade de France. Barshim, que en un primer momento parecía lesionado muscularmente, pudo recuperarse y en su segundo intento no falló y superó el listón, eso sí, dejando muchas dudas sobre su estado físico ya que tras el salto volvió a salir cojeando.
Habrá que ver si puede recuperarse de aquí al sábado, cuando se disputará la final. Antes de abandonar el estadio, los dos saltadores celebraron la clasificación fundiéndose en un emotivo abrazo.
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