Turbulencia aérea desanima el debut de la regata en Marsella
La espera ha terminado, pero el debut de la regata en Marsella no ha sido nada fácil. La turbulencia aérea ha sido el protagonista indeseable de la jornada inaugural, generando condiciones climáticas adversas que han obligado a los organizadores a retrasar el inicio de las pruebas. La expectación era alta en la ciudad francesa, donde se esperaba un gran espectáculo en el marco de la competencia náutica más importante del año. Sin embargo, la fuerte borrasca que ha azotado la zona ha obligado a los participantes a esperar pacientemente a que las condiciones mejoren. A continuación, se analizarán las consecuencias de esta situación y cómo afectará el desarrollo de la regata.
Viento nulo y decepción en debut de regata en Marsella, Juegos Olímpicos
No fue el estreno soñado para los navegantes españoles en los Juegos Olímpicos. El viento casi inexistente en aguas de Marsella provocó que la clase iQFoil se quedara sin navegar la maratón que tenía prevista participar Nacho Baltasar y Pilar Lamadrid para abrir los Juegos Olímpicos.
El viento apenas llegó a los seis nudos de intensidad y en algunos momentos hasta menos, mostrando una imagen desoladora de los 49er vagando por el golfo de Marsella. La falta de viento fue un obstáculo insuperable para la mayoría de los navegantes, que no pudieron mostrar su habilidad en el agua.
Sin embargo, hubo una excepción. Diego Botín y Florian Trittel en 49er salvaron el día. Tras una mala primera prueba en la que acabaron decimosextos, en las dos siguientes fueron capaces de sobreponerse con un sexto y un cuarto puesto que les permiten no quedar descolgados de la cabeza.
La tripulación española ocupa la octava posición en la general, a tres puntos de las medallas, lo cual es un inicio esperanzador pero tienen la espada de Damocles en la cabeza, ya que no pueden permitirse ni un fallo más. Los neozelandeses Kale McHardie y McKenzie dominan la clasificación.
A las que se les ha complicado desde el principio en FX es a Támara Echegoyen y Paula Barceló, que navegaron en el peor de sus escenarios, el del poco viento. Aunque faltan aún nueve mangas por disputarse, tres malos puestos, un 19-15-14, a la tripulación española se le ha puesto muy cuesta arriba.
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