Victoria impresionante de Tadej Pogacar en la Lieja-Bastoña-Lieja
El ciclista esloveno Tadej Pogacar ha logrado una victoria impresionante en la renombrada clásica ciclista Lieja-Bastoña-Lieja, una de las pruebas más exigentes del calendario. Pogacar, actual campeón del Tour de Francia, demostró su dominio y fortaleza al imponerse en un emocionante final ante sus rivales más destacados. Su actuación ha dejado boquiabiertos a aficionados y expertos, quienes elogiaron su valentía y determinación en los momentos decisivos de la carrera. Con esta gesta deportiva, Pogacar consolida su posición como una de las figuras más destacadas del ciclismo mundial y deja una marca imborrable en la historia de esta legendaria competición.
Tadej Pogacar arrasa en la Lieja-Bastoña-Lieja con una victoria épica
Empiezan a acabarse los calificativos con Tadej Pogacar. El esloveno partía como claro favorito a la victoria en la 110ª edición de la Lieja-Bastoña-Lieja y cumplió con lo que de él se esperaba, dando espectáculo en la 'decana' de las clásicas. En esta ocasión, Remco Evenepoel no estaba presente recuperándose de una fuerte caída en la Itzulia y el neerlandés Mathieu Van der Poel, quien se perfilaba como su gran rival, no tuvo su mejor día, aunque logró un meritorio tercer puesto.
Fue una Lieja marcada por el frío, la lluvia torrencial, una distancia de 254,5 kilómetros, 11 cotas a subir y bajar, y más de 4.000 metros de desnivel. En este desafiante escenario, 'Pogi' empleó un tiempo de 6h13'48.
De las 11 cotas a coronar, tres ubicadas al final del recorrido destacaban como claves en el desenlace de la carrera. El equipo de Pogacar, UAE, controló en buena medida la prueba, que estuvo marcada por una montonera a 100 kilómetros de meta que afectó a Van der Poel y mermó sus opciones, así como por un problema mecánico de Pidcock.
En las duras rampas de La Redoute, Pogacar lanzó el ataque decisivo a 34 kilómetros de meta, dejando atrás a sus perseguidores con una facilidad asombrosa. Ni la lluvia torrencial pudo mermar su exhibición. Detrás, Bardet logró la segunda plaza mientras que Van der Poel mostró su casta al conseguir el tercer puesto.
Esta es la segunda victoria de Pogacar en la Lieja, el sexto monumento para él, el triunfo profesional número 70 y la séptima victoria en diez días de competición en esta temporada. Un rendimiento que lo sitúa en un nivel sobresaliente, digno de un auténtico caníbal del ciclismo.
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