En un emotivo adiós, Raúl García se ha despedido del Athletic Club, el club que ha sido su hogar durante muchos años. En su discurso de despedida, el delantero español no ocultó su emoción al hablar de su partida. Me voy siendo Athletic Club, fueron sus palabras exactas, que reflejan la conexión especial que ha tenido con el equipo y sus seguidores. A lo largo de su carrera, García ha sido un jugador clave para el Athletic, anotando goles decisivos y llevando al equipo a momentos de gloria. Ahora, después de una trayectoria llena de logros, se despide de la afición rojiblanca, dejando un vacío en el equipo y en los corazones de los aficionados.
Raúl García se despide con un corazón lleno de emoción y orgullo
La jornada de ayer en San Mamés fue emocionalmente intensa, ya que el Athletic Club despidió a uno de sus mitos recientes, Raúl García. El navarro, que se encuentra en sus últimos días como futbolista profesional, aseguró que se marcha feliz por lo que tiene por delante, como tener más tiempo con su familia.
En su comparecencia, Raúl estuvo rodeado de sus compañeros actuales y pasados, del cuerpo técnico, de sus padres y resto de familia, y de amigos. El acto estuvo presidido por la Copa ganada hace un mes en Sevilla, junto con la Supercopa de 2021 y el dorsal 22 zurigorri con su nombre a la espalda, que ha lucido en 359 compromisos desde que llegó a Bilbao en 2015.
No era athleticzale, pero me voy siendo athleticzale, manifestó el futbolista, que se ha ganado el cariño y el respeto de la afición de San Mamés a base de sudor y sinceridad. Raúl aseguró que se siente muy orgulloso de haber venido al Athletic y que su decisión de retirarse no ha dependido de ganar la Copa o no, sino de escuchar a su cabeza y priorizar su familia.
El navarro también habló sobre su legado en el fútbol, con 814 encuentros en su haber, sumando sus etapas en Osasuna, Atlético y Athletic. Reconoció que echa la vista atrás y muchas veces te da vértigo todo lo vivido, pero destacó la importancia de persistir e insistir para alcanzar las cumbres que ha coronado.
La decisión de colgar las botas no ha dependido de ganar la Copa o no, y tampoco el cuerpo le ofrecía señales negativas. A nivel físico me encuentro muy bien, no tengo ningún problema como para no seguir, aseguró Raúl. Sin embargo, su cabeza le pedía que dedicara más tiempo a su familia.
Raúl también se refirió a su relación con sus compañeros de equipo, destacando la importancia del compañerismo y el trabajo en equipo. No podemos perder la perspectiva de que somos un equipo, aseguró.
Finalmente, Raúl García expresó su confianza en el bloque del Athletic para seguir en la pelea por cosas igual de bonitas que en la presente temporada. Creo que va a ser así y ojalá sea porque ahora quiero disfrutar y no quiero sufrir desde la grada, aseguró.
Y si algo se tuerce, ahí estará el navarro para dar algún tirón de orejas si es necesario. Seguid en la línea que seguís. Yo no estaré, pero no os preocupéis que estaré pendiente para apretaros cuando haga falta, les dijo a sus compañeros con un evidente toque de humor.
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