En una reciente noticia que ha sacudido la opinión pública, se ha revelado que la declaración de la mujer de María del Monte ha sido filtrada, confirmando así las sospechas que rondaban en torno al caso. La información expuesta revela que, en efecto, había individuos que conocían con exactitud el lugar al que dirigirse, lo cual plantea interrogantes sobre la intencionalidad detrás de este conocimiento previo. Este giro inesperado en el desarrollo del caso ha generado un debate en torno a la seguridad y confidencialidad de la información en nuestra sociedad actual. Es evidente que este suceso no solo impacta a los involucrados directamente, sino que también nos invita a reflexionar sobre la importancia de salvaguardar la privacidad y la integridad de los datos personales en un mundo cada vez más conectado.
Declaración de la mujer de María del Monte confirma sospechas sobre robo
Antonio Tejado continúa en prisión preventiva, comunicada y sin fianza. El sobrino de María del Monte compareció hace unas semanas ante el juez instructor y, posteriormente, su abogado solicitó la puesta en libertad de su cliente. Sin embargo, dicha petición fue rechazada tanto por los abogados de su tía, como por la fiscalía y el juez.
Telecinco emitió la declaración de María del Monte ante el juez, en la cual se revelaron detalles escalofriantes sobre el caso. El programa '¡De viernes!' logró obtener la grabación de las declaraciones de Antonio Tejado, María del Monte e Inmaculada Casal ante el juez, ofreciendo imágenes impactantes y un relato desgarrador de las víctimas del robo.
En su testimonio, María del Monte describió la agresividad de los ladrones durante el robo, mencionando: Veo que cogen a mi hija y corriendo me coge de los dos brazos. Me apretó y me hizo daño en los brazos. Me lleva, me tumba en la cama boca abajo y me atan con el cable de mi iPhone. Me pone la almohada en la cabeza y empieza a presionarme y luego a darme golpes. En el momento que me quito las manos de encima pude respirar.
Por su parte, Inmaculada Casal, en su declaración ante el juez, expresó sus sospechas de que los ladrones contaran con información privilegiada, afirmando: Ni nos mataron ni nos hirieron con heridas de sangre, pero yo noté ensañamiento, sobre todo con mi hija. Entre María del Monte y yo, con ella vi un trato un poquito más especial. Los privilegios de la fama o yo qué sé. Y la casa no la manipularon, no registraron más, sabían que la puerta no funcionaba, sabían la distribución de la casa perfectamente, sabían las personas que estábamos allí dentro durmiendo perfectamente. Y sabían dónde tenían que ir y cómo era la caja (fuerte).
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