El legendario Royale Union Saint-Gilloise consigue su primer título en 89 años
En un día histórico para el fútbol belga, el Royale Union Saint-Gilloise ha culminado con éxito su campaña en la Jupiler Pro League, conquistando su primer título en 89 años. Este logro es el resultado de una temporada destacada, en la que el equipo dirigido por Felice Mazzu ha mostrado una gran consistencia y solidez. Con este título, el Royale Union Saint-Gilloise se une a la lista de campeones de Bélgica, poniendo fin a una sequía de títulos que duraba casi nueve décadas. Esta hazaña histórica es un gran reconocimiento al trabajo y la dedicación del equipo y su cuerpo técnico.
Royale Union Saint-Gilloise conquista su primer título en 88 años
El Royale Union Saint-Gilloise ganó este jueves la Copa de Bélgica tras superar 1-0 al Amberes y puso fin a 88 años sin ganar un título, la Liga de la temporada 1934-35.
Casi nueve décadas después de cerrar una de las etapas más exitosas de uno de los clubs históricos de Bélgica, el Royale Union Saint-Gilloise volvió a llevar un trofeo a sus vitrinas y a sacar a las calles a una afición que desde hace dos temporadas comenzó a soñar con la idea de volver a ganar un título cuando se encaminaban a sumar un siglo en blanco.
Un japonés, el héroe
Un gol al borde del descanso del japonés Koki Machida desató la locura en la mitad de la grada que coloreó de amarillo el estadio Estadio Rey Balduino de Bruselas. El antiguo Heysel, escenario de antiguas desgracias, fue el lugar donde la hinchada del Royale Union Saint-Gilloise estalló eufórica tras el tanto de su jugador.
Machida aprovechó un rechace dentro del área a la salida de un córner para hacer el único tanto que lució en el marcador. Su equipo, hasta ese momento, sufrió para hacerse con los mandos del partido. Incluso se salvó de tener que remontar la final gracias al palo, ya que Jurgen Ekkelenkamp estrelló contra la madera un cañonazo desde fuera del área a los veinte minutos.
Fin a una larga sequía
El gol de Machida cambió el rumbo del duelo y el Royale Union fue superior durante la segunda parte. Incluso pudo aumentar su diferencia, pero Gustaf Nilsson, Cameron Puertas y Mohamed Amoura desperdiciaron tres ocasiones muy claras que podrían haber sentenciado el duelo.
El pitido final acabó con una larga sequía sin títulos y con muchas fases deprimentes en las que el Royale Union caminó sin rumbo por las categorías inferiores del fútbol belga. Su mejor etapa, entre 1901 y 1935, en la que ganó once ligas y fue subcampeón en ocho ocasiones, ya quedaba muy lejos. Su anterior Copa databa de 1904, por lo que ha tardado ¡110 años! en volver a ganarla.
El ocaso
Después de la Segunda Guerra Mundial inició su ocaso. Aún llegó a unas semifinales de la Copa de Ferias en 1958, pero descendió a Segunda División en 1963 y de nuevo en 1965 tras un ascenso intermedio. A partir de ahí comenzó su descenso a los infiernos. Tocó fondo en el curso 1981-82, en el que llegó a formar parte de la cuarta categoría del fútbol belga.
La llegada del británico Tony Bloom, también propietario del Brighton de la Premier League, en el verano de 2018 como nuevo dueño del club, trajo nuevos tiempos al Royale Union Saint-Gilloise, que en la campaña 2020-21, 48 años después, ascendió a la máxima categoría del fútbol belga.
El resurgir
Desde entonces, no ha dejado de crecer. En la temporada 2021-22 ganó la fase regular de la Liga, pero en los playoff por el título terminó en la segunda plaza por detrás del Club Brujas. Además, en el curso siguiente llegó a los cuartos de final de la Europa League y fue eliminado por el Bayer Leverkusen. La pasada campaña acabó tercero en la Liga y en la actual aspira al doblete tras ganar la Copa: fue primero en la liga regular y ahora pelea con el Anderlecht y con el Club Brujas por proclamarse campeón.
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