En el mercado automotriz, la tendencia de los modelos de cruiser de origen chino sigue en auge. En esta ocasión, la marca Lifan se suma a la lista de fabricantes que apuestan por este estilo de vehículos, con el lanzamiento de su nuevo modelo V400. Esta nueva incorporación se suma a la creciente oleada de modelos de cruiser chinos que han ido llegando al mercado en los últimos tiempos, revolucionando la forma en que se conciben los vehículos de este segmento. Con características y especificaciones que prometen sorprender, la Lifan V400 se perfila como una opción atractiva para aquellos que buscan un vehículo con un diseño único y una experiencia de conducción emocionante.
La V de Lifan: una cruiser de lujo con argumentos para conquistar China
El mercado chino tiene sus peculiaridades, demasiadas. Sin embargo, si hay una máxima no escrita es que cuando un modelo o tipo de moto triunfa, lo hace a lo grande. En estos momentos hay dos segmentos que están brillando con luz propia en el gigante asiático, el de las Adventure Cub de estilo retro y el de las cruiser, en sus múltiples variantes.
Y eso solo puede significar que los fabricantes chinos se han puesto las pilas para llenar el mercado con distintas propuestas. El enésimo ejemplo es la Lifan V 400, una cruiser de formas redondeadas y estilo clásico que no tiene nada que envidiar a la Benelli Leoncino 400, si bien esta última es probable que llegue a Europa mientras que la protagonista de hoy no está nada claro que lo haga.
La Lifan V 400 tiene argumentos para poner en apuros a la Benelli Leoncino 400 en China
La Lifan V 400 se orquesta a partir de un motor V2 de 397 c.c. con refrigeración por líquido. Se espera que este motor acredite una potencia máxima de 39 CV, superando así a la que debe ser su rival directa, la bobber de Benelli. Eso sí, también hay que remarcar que la propuesta de Lifan tiene otra perspectiva y su peso es de 210 kilogramos, casi 40 kilos más que la Benelli. Además, también sus cotas y medidas también son superiores.
La Lifan V 400 presenta un sistema de suspensiones con una horquilla invertida en la parte delantera y un doble amortiguador trasero. Para el sistema de frenado, la marca recurre a discos tanto delante como detrás, con tecnología ABS con el fin de mejorar su tacto. La cruiser de Lifan además monta una llanta de 15 pulgadas en la rueda delantera, mientras que en la trasera el tamaño de la llanta es de 18 pulgadas.
Equipamiento de lujo
A nivel de equipamiento, la cruiser de Lifan V 400 presume de una instrumentación digital con una pequeña pantalla que ofrece un buen número de datos. Se complementa con una toma USB por delante del depósito. No falta el sistema de iluminación full-LED y el ya citado sistema de ABS como parte de su propuesta de serie. Argumentos que le permitirían tener un hueco en el mercado europeo, si bien parece poco probable su salto al viejo continente.
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