La DGT advierte sobre la tasa de alcohol en el nuevo reglamento: No se podrá beber ni un sorbo

La DGT advierte sobre la tasa de alcohol en el nuevo reglamento: No se podrá beber ni un sorbo

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha lanzado una advertencia a todos los conductores españoles sobre el nuevo reglamento que entra en vigor en cuanto a la tasa de alcohol en la conducción. A partir de ahora, no se podrá beber ni un sorbo de alcohol antes de subirse al volante. La institución ha decidido implementar esta medida para reducir el número de accidentes relacionados con la conducción bajo los efectos del alcohol, que cada año causan centenares de víctimas en las carreteras españolas. Esta nueva normativa tiene como objetivo proteger la vida de los conductores y otros usuarios de la vía, por lo que es fundamental que todos los conductores sean conscientes de esta nueva restricción y la respeten.

La DGT impone 'tolerancia cero' al alcohol en la carretera: no se puede beber ni un sorbo

La nueva tasa de 0,2 gramos de alcohol por litro de sangre (0,1 miligramos en litro por aire aspirado) representa una nueva política de tolerancia cero con el consumo de bebidas alcohólicas al volante. Así lo advierte el director general de Tráfico, Pere Navarro, en una entrevista concedida a la agencia EFE.

El máximo responsable de la DGT advierte a los conductores de manera tajante: No se puede beber absolutamente nada. La rebaja de 0,5 a 0,2 g/l, que se materializará lo antes posible aunque no cree que sea este año, viene avalada por una recomendación de la Comisión Europea como medida para disminuir la siniestralidad, así como por las peticiones de numerosas asociaciones de víctimas y fundaciones del ámbito de la seguridad social.

Una medida para reducir la siniestralidad

Países como Suecia y Noruega, referentes en este campo, tienen también establecido un 0,2 y va en coherencia con las campañas de la Dirección General de Tráfico (DGT) que advierten de que si bebes no conduzcas o solo cero tiene cero consecuencias.

Navarro ha explicado que la medida viene a superar el debate del consumo moderado y por no entrar en disquisiciones sobre cómo puede afectar a los niveles de alcohol el sexo o la edad. No se puede beber y conducir, insiste.

¿Por qué no se fija una tasa cero?

Preguntado por qué entonces no se establece la tasa cero, se remite a la recomendación de la Comisión Europea, a Suecia y Noruega, países en los que se mira España, y a que hay algunos procesos digestivos que pueden dar niveles en sangre, lo que técnicamente nos podría crear algún conflicto.

Cree que hay bastante consenso sobre la medida. No hemos visto ninguna opinión en contra, lo cual en este país y en estos momentos, pues tiene su miga, asegura.

Un paso hacia la reducción de la siniestralidad

Navarro rechaza la idea de que fijar una tasa cero sea impopular, a la vez que no cree que la de 0,2 cree confusión al conductor que pueda pensar que tiene margen para beber. En España, asegura, si se explican bien las cosas, el ciudadano lo entiende y responde.

Es absurdo el debate de una cerveza si, dos no, o una copa de vino si y dos no. Puedes beber lo que quieras, pero no si vas a conducir, no, incide. El mensaje del organismo es claro.

Navarro apunta a que el país está estancado en cifras de mortalidad, con 1.800 fallecidos cada año y 9.200 heridos hospitalizados. No podemos resignarnos, ni quedarnos con los brazos cruzados dando palotes y contando y contando víctimas, dice.

Algo había que hacer y la rebaja de la tasa de alcoholemia al volante es un paso que nos da la impresión de que tendrá sus efectos en la reducción de la siniestralidad, recalca el director de tráfico, si bien no hay estudios específicos que cuantifiquen en datos la posible reducción de los accidentes con dicha medida.

Siguiente paso: las drogas

En cuanto a si la medida se puede extrapolar al consumo de drogas al volante, ha asegurado que le gustaría, si bien es mucho más complejo. Con el alcohol tenemos unas tasas muy marcadas, con las drogas todavía no hemos llegado a poder identificar el nivel exacto, con lo cual solo se habla de presencia o no en el organismo.

El director de tráfico ha reconocido que la presencia de estupefacientes en los conductores va en aumento, por lo que ha apuntado que después del alcohol toca insistir con el tema de las drogas.