Francia da un giro inesperado y se convierte en rival directo de España en lugar de Portugal
En un sorprendente giro de eventos, Francia ha decidido modificar su estrategia y ahora se perfila como un rival directo de España, desplazando a Portugal de su posición tradicional. Esta inesperada jugada ha generado un gran revuelo en el panorama internacional, ya que se esperaba que Francia mantuviera su alianza con Portugal. Sin embargo, las nuevas circunstancias han llevado a los líderes franceses a reevaluar sus prioridades y buscar una mayor influencia en la región. Esta noticia puede tener importantes implicaciones en la política exterior y la economía de ambos países, y todos los ojos están puestos en la evolución de este nuevo escenario.
Francia da un giro inesperado y se convierte en rival directo de España en lugar de Portugal
No hubo excesivas sorpresas en los onces de ambos combinados. Deschamps tenía la obligada baja de Rabiot por sanción y entró el esperado Camavinga, así que la única novedad real fue la suplencia del criticado Thuram, para dar entrada a Kolo Muani como extremo y centrar a Griezmann. Roberto Martínez no tocó nada, como era previsible.
Tuvo más protagonismo Portugal, aunque fue un primer tiempo de muy pocas ocasiones. Ganó en atractivo el partido gracias a Rafael Leao, que salió con ganas de poner en problemas a Jules Koundé. Y vaya si los tuvo, porque el peligro de los lusos llegó en todo momento por la banda del extremo del Milán. Mucho más potente que el francés, quiso averiguar si su MVP de octavos de final fue justificado mientras se ayudaba también de las subidas de Nuno Mendes.
Fuera de eso, el partido fue ciertamente plano. Cristiano Ronaldo apenas tocó balón y Portugal quiso hacer superioridad cerrando a Bernardo Silva, pero las jugadas se morían en tres cuartos por falta de efectivos. El primer disparo fue de Bruno Fernandes, encontrando la respuesta de Camavinga minutos después también desde fuera del área, con una buena parada de Maignan. Francia tenía sus momentos, pero muy pendiente de poder contragolpear con Mbappé, que estuvo tan apagado como CR7. Más protagonismo de Griezmann, mucho más participativo por dentro, pero sin llegar a marcar las diferencias.
No cambió la tónica en la segunda mitad. Al menos durante los primeros minutos. Kylian arrancó con una combinación y tiro, pero se mantuvo desaparecido y hasta dolorido por un balonazo que impactó en su máscara. Portugal, tras pasar unos minutos en los que Francia presionó su salida de balón, volvió a mandar en el juego. Tardó en carburar, pero empezó a encontrar las vestiduras galas. Soportó Maignan al equipo, con dos paradones espectaculares. El primero a Bruno Fernandes tras un espectacular pase filtrado de Cancelo y el segundo a Vitinha, que remató en una buenísima posición asistido por el diablo Leao.
No hacía méritos Francia para cambiar la dinámica. Seguía manteniendo el plan del contragolpe, pero no concretaba más que uno. Aunque por poco le vale para adelantarse. No lo logró gracias a Rúben Dias, que tapó de forma milagrosa el remate a Kolo Muani. Buscó soluciones Deschamps y sacó del campo a Griezmann, inadvertido en el segundo tiempo, para meter de Dembélé y cerrar a Mbappé. Salió Ousmane con ganas de demostrar tras no haber tenido ningún minuto en octavos. Recortes, cambios de dirección, mostró todo su arsenal mientras Camavinga volvía a tener otra clamorosa que se escapaba por milímetros. Y hasta casi la clava por la escuadra, en un recital que se ganó los cánticos de la grada.
No tuvo más remedio Roberto Martínez que mover ficha. Colocar por dentro a Bernardo Silva para recuperar el balón y sacar a Bruno Fernandes y Cancelo, entrando al capo Semedo y Coinceiçao para quedarse con la banda derecha. No tocó a Cristiano, a pesar de estar totalmente desaparecido, pero al menos logró un tiempo de tregua tras el asedio momentáneo francés. Su único toque de balón fue en una falta a la barrera que no era ni para que fuera el lanzador. Al contrario, el también veterano Pepe estaba dando una lección sobre el verde.
La tensión se podía cortar con un cuchillo en los últimos minutos en los que ni Francia ni Portugal arriesgaron, con un solo disparo sencillo de parar de Mbappé, y el partido deparó la segunda prórroga del día. Aun las piernas cansadas, solo hubo un cambio, de Fofana por Camavinga. No se tocó a CR7, que solo comenzar mandó a la grada una clarísima tras jugadón de Conceiçao. El partido precisaba de un tanto para romperse, pero Pepe estaba para negárselo a Mbappé en una Franca que solo corría al espacio.
La selección lusa tenía le pelota, pero le faltaba el colmillo para hacer daño. Y Leao, que perdió mucho protagonismo. Tuvo un remate claro desde dentro del área, pero Saliba con su cuerpo estuvo providencial. Sorprendió al descanso Deschamps sentando a Mbappé, al que ya se le veía agotado, por Barcola. También Leao, dando paso a Joao Félix, algo más comprensible, para un duelo con sabor azulgrana con Koundé. Y tuvo una clamorosa solo arrancar de cabeza que envió al lateral de la red. No hubo más, Francia se mostró rácana y Portugal tampoco quiso desajustarse, aunque tuvo una más en la última jugada que remató demasiado blando Nuno Mendes a las manos de Maignan, llegando el partido a la lotería de los penaltis.
Venía de ganar Portugal en octavos de esa forma con un imperial Diogo Costa y tanta confianza tenía Cristiano Ronaldo en su compañero que decidió que empezara lanzando Francia, pero Dembél marcó, lo mismo que el capitán luso, que fue el primero de Portugal en tirar. No detuvo ninguno esta vez el meta portugués, tampoco Maignan, pero el palo repelió el lanzamiento de Joao Felix y Theo dio el pase a Francia, que será rival de España, en el quinto (3-5).
Alineación del partido:
Francia: Mike Maignan, Jules Koundé, Dayot Upamecano, William Saliba, Théo Hernández, Aurélien Tchouaméni, N'Golo Kanté, Eduardo Camavinga, Randal Kolo Muani, Kylian Mbappé, Antoine Griezmann.
Portugal: Diogo Costa, João Cancelo, Nuno Mendes, Rúben Dias, Pepe, João Palhinha, Bernardo Silva, Bruno Fernandes, Vitinha, Cristiano Ronaldo, Rafael Leão.
Suplentes:
Francia: Brice Samba, Alphonse Areola, Benjamin Pavard, Ferland Mendy, Ibrahima Konaté, Warren Zaïre-Emery, Youssouf Fofana, Olivier Giroud, Ousmane Dembélé, Kingsley Coman, Bradley Barcola.
Portugal: Rui Patrício, José Sá, Nélson Semedo, Diogo Dalot, Danilo Pereira, Gonçalo Inácio, António Silva, Matheus Nunes, João Félix, Diogo Jota, Pedro Neto, Francisco Conceição.
Entrenadores:
Francia: Didier Deschamps
Portugal: Roberto Martínez
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