Groenewegen se impone en el sprint antes del duelo entre Pogacar y Vingegaard en la contrarreloj individual

Groenewegen se impone en el sprint antes del duelo entre Pogacar y Vingegaard en la contrarreloj individual

En un día emocionante en el ciclismo profesional, la etapa previa a la contrarreloj individual del Tour de Francia ha tenido su protagonista en Dylan Groenewegen, quien se ha impuesto en un sprint intenso y disputado. Sin embargo, la atención general se centra en la contrarreloj individual que se disputará mañana, donde los grandes favoritos, Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard, se enfrentarán en un duelo a muerte por el liderato de la general. La tensión es máxima en el pelotón, y todos los ojos estarán puestos en estos dos gigantes del ciclismo que lucharán por cada segundo en la lucha por la victoria.

Groenewegen se impone en sprint emocionante antes de la contrarreloj individual

La sexta etapa del Tour de Francia ha dejado una jornada decidida al sprint, con Dylan Groenewegen (Team Jayco AlUla) como vencedor en un día en el que el viento ha sido protagonista tras provocar varios lances de carrera.

La jornada presentaba una sexta etapa de 163,5 kilómetros entre Mâcon y Dijon, con aparentes dificultades en cuanto a recorrido, pero ha sido el viento el que ha provocado estragos, con muchos nervios en el pelotón que han dejado continuos toques, luchas por posiciones y varias caídas que han parecido saldarse sin consecuencias.

Viento y nervios en la sexta etapa, mientras Pogacar se prepara para la contrarreloj

La subida inicial al Bois Clair, de cuarta categoría y 1,6 kilómetros al 6%, provocaba un tímido ataque por detrás del líder de la montaña Jonas Abrahamsen y Zingle. Sin más intención que la de sumar puntos para la clasificación de lunares, ambos abrían unos segundos de diferencia ante la pasividad de un pelotón dispuesto a guardar fuerzas.

La lluvia no modificaba la hoja de ruta de la serpiente multicolor, unificada en una parte central de la etapa en la que el viento amenazaba con provocar problemas. Ello provocaba una constante lucha por las posiciones en la parte delantera del pelotón que se cobraba alguna víctima.

Mark Cavendish, quien sufría un pinchazo que le descolgaba del grupo principal, y Juan Ayuso, con Tadej Pogacar desarropado durante los breves kilómetros en los que el grupo tardaba en volver a unificarse.

Los nervios eran constantes a pesar de que el pelotón rodaba junto. Así, Abrahamsen se veía perjudicado en un enganchón múltiple en una última parte de la carrera en la que los nervios crecían con cada pedalada.

Pero ello no alteraba a los favoritos, que llegaban en el grupo principal, con los velocistas dispuestos a jugarse el triunfo. Este, como se esperaba, se decidía en una aceleración final en la que Dylan Groenewegen se imponía a Jasper Philipsen y a Biniam Girmay, con Fernando Gaviria en la cuarta posición. Sin problemas, Tadej Pogacar mantenía maillot amarillo y diferencias sobre Remco Evenepoel y Jonas Vingegaard.