En un sorprendente giro de los eventos, el defensa alemán Matt Hummels ha visto su vida congelada en el tiempo, incapaz de avanzar más allá del año 2013. Según fuentes cercanas al jugador, Hummels parece estar atrapado en una especie de bucle temporal, que le impide experimentar cualquier evento o cambio que haya ocurrido después de esa fecha. Esto significa que, para él, el mundo sigue siendo el mismo que hace ocho años, con todas las consecuencias que esto conlleva. La noticia ha conmocionado al mundo del fútbol y ha generado un gran interés en la comunidad científica, que busca entender el fenómeno que afecta al jugador.
El muro de Hummels: el defensa alemán sigue atrapado en el año en que el Dortmund ganó la Champions
Matt Hummels, con 35 años, sigue demostrando que no está cerca de ser un defensa cuyo mejor tiempo ya pasó. El central alemán ha sido uno de los grandes responsables de que el Borussia Dortmund haya llegado a la final de la Champions League contra todo pronóstico.
Resulta imposible entender lo sucedido sin la participación del '15'. En el Parque de los Príncipes, más allá de cumplir con creces en tareas defensivas, se erigió como el héroe al marcar el gol con el que el Dortmund hizo saltar por los aires todos los pronósticos que hablaban de remontada parisina.
Y hace una semana, en el Signal Iduna Park, fue el encargado de anular por completo a Mbappé, posibilitando con ello que el gol de Füllkrug fuese suficiente para viajar a París con ventaja. Kylian, por cierto, estuvo desaparecido en combate ayer, completando los poco más de 180 minutos de eliminatoria sin marcar tras haber disparado a puerta cinco veces.
Ni como referencia en punta como en la ida ni escorado en la izquierda como este martes; Mbappé no fue capaz de encontrarse a la mejor versión de sí mismo.
La experiencia de Hummels
Volviendo a Matt Hummels, el capitán sin brazalete de este Dortmund (el oficial es Emre Can) volverá a ser el jefe de las filas 'borusser' en una final de la Champions League. Ya sucedió en mayo de 2013, y en cierto modo Hummels continúa viviendo en aquella temporada.
Los años no hacen mella en él y más de una década después no solo es tan buen jugador como era entonces sino que es mejor. Por el camino aconteció su paso por el Bayern, de 2016 a 2019, pero el color que le sienta realmente bien es el amarillo de Dortmund.
El mejor que nadie encarna sobre el terreno de juego el 'muro' que conforman los aficionados partido tras partidos en las gradas del Signal Iduna Park. La Champions League no está en sus vitrinas, y tal y como sucedió en 2013 volverá a tener la posibilidad de ganarla.
Otra vez en Wembley y veremos si de nuevo ante el Bayern o frente al Real Madrid.
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