En una noche que se convirtió en una de las más sonrojantes de su carrera, el mediocampista portugués Casemiro vivió un infarto en el Selhurst Park al caer derrotado con su equipo, el Manchester United, ante el Crystal Palace. El golazo de Jordan Ayew a los 32 minutos del primer tiempo sentenció el partido y puso fin a la racha ganadora de ocho partidos consecutivos del conjunto dirigido por Erik ten Hag. La derrota inesperada del Manchester United ante un rival teóricamente más débil generó un gran impacto en el mundo del fútbol, y Casemiro no fue ajeno a la crítica generalizada que recibió su equipo.
La noche de pesadilla de Casemiro: Crystal Palace le endosó cuatro goles al Manchester United
Casemiro (32) vive el peor momento de su carrera deportiva. Dentro del triste año que está viviendo su equipo, el Manchester United, el brasileño está saliendo retratado continuamente por sus rivales. Está en baja forma y el ritmo trepidante de la Premier League le supera.
Ayer, en la goleada histórica que les endosó el Crystal Palace, salió en la foto de los cuatro goles. En tres de ellos siendo el principal culpable. Michael Olise, la joya de 22 años del Palace, con un valor de mercado de más de 50 millones, campó a sus anchas, haciéndoselo pasar muy mal al ex del Real Madrid.
La caída de Casemiro
Casemiro, desde que salió del club blanco a cambio de 80 millones ha bajado considerablemente su nivel. ¿Las razones? Que su equipo juega y compite peor, que debe abarcar más campo y las piernas no le dan para ello, y que los colegiados no son nada permisivos con sus faltas tácticas. El destructor, destruido.
Los errores de Casemiro
Estos son los errores que cometió en los goles del Palace:
Primer gol (1-0, Olise)
Intento de anticipación fallido. En defensa de Casemiro hay que decir que jugó de central y no de centrocampista, algo que en este gol le salió caro. El '18' salió de su zona para tratar de arrebatarle el esférico a Olise en tres cuartos. Se la jugó a una carta, tratando de intuir el regate que iba a hacer el joven talento con la mala suerte que con tan solo un toque le dejó sentado y condujo hasta la frontal para acabar definiendo con un tiro cruzado pegado al palo.
Segundo tanto (2-0, Mateta)
Perdida en salida de balón sin repliegue. En el segundo gol es en el que menos responsabilidad tuvo. Tanto Dalot como Antony tampoco estuvieron finos. Fue en una salida de balón de 'Case' por un costado, en la que se la dio a Antony primero y luego a Dalot en situación comprometida para ellos, de espaldas y con rivales encima, acabando con la pelota perdida, con el internacional brasileño yendo al suelo a la desesperada y sin capacidad para replegar. Luego Mateta le hizo un traje a Evans y definió fuerte al palo largo.
Tercer gol (3-0, Mitchell)
Perdida de marca y falta de reacción. Por alguna razón difícil de explicar Casemiro estaba 'out'. El gen competitivo que siempre le ha caracterizado en las buenas y en las malas, desapareció. En este caso se despistó, no siguió su marca y nada pudo hacer ante Mitchell, quien se anticipó para rematar a placer un centro de Andersen.
Cuarto gol (4-0, Olise)
Lentitud, falta de tensión y siesta descomunal. El cuarto gol fue la gota que colmó el vaso definitivamente. Se vio una falta de tensión alarmante en Casemiro. Había recuperado bien la pelota, pero de manera incomprensible se fue conduciendo el balón al córner propio y de espaldas, sin despejar, hasta que Muñoz le puso las manos en la parte alta de la espalda, se dejó caer, y se la quitaron. Luego Olise la puso en la escuadra con un golazo.
El ejemplo más evidente de que la noche iba a acabar en pesadilla para él fue que con 2-0 abajo consiguió anotar el que era el 2-1, pero fue anulado por un fuera de juego justito. En Inglaterra está recibiendo críticas feroces, que aseguran que ''no da el nivel''.
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