Un líder con magnetismo
En un mundo cada vez más complejo y cambiante, la figura de un líder con magnetismo se vuelve cada vez más relevante. La capacidad de inspirar y motivar a los demás es fundamental para alcanzar objetivos y superar obstáculos. En este sentido, un líder con magnetismo es capaz de unir a las personas detrás de una visión común, generando un sentido de pertenencia y compromiso. Pero, ¿qué hace que un líder tenga ese algo especial que atrae a la gente? ¿Cuáles son las características que lo convierten en un líder carismático? En las siguientes líneas, exploraremos el magnetismo de un líder y cómo puede ser clave para el éxito.
El Lateral Izquierdo que Magnetiza a la Selección Española
Su madre le pidió que se dejara el pelo largo para identificarlo en el campo cuando era un niño. Hoy, esa melena larga separada por una raya en el medio forma parte del carisma del lateral izquierdo de la selección española que está entusiasmando en la Eurocopa de Alemania.
Da la sensación de que hace mucho tiempo que está jugando a fútbol. De la cantera del Espanyol pasó al juvenil de primer año del FC Barcelona, luego al Eibar, cedido al Getafe, donde se fajó tres años con Bordalás, se fue al Brighton y el Chelsea lo fichó por 68 millones de euros, porque el City deslizó que lo quería y vino a decir que estaba dispuesto a pagar esa suma y los londinenses cayeron pagando una cifra que en aquel momento fue muy elevada.
Parece que Marc Cucurella es un veterano, pero solo tiene 25 años. Es un tipo que ha sorprendido en esta Eurocopa y ha competido con el tándem Nico-Lamine que ha acaparado portadas, comentarios, redes e imágenes en todo el mundo.
Es un jugador que ha explotado en esta Eurocopa y que hace que muchos barcelonistas se pregunten por qué no está en el FC Barcelona. Siempre hay una explicación: estaba Jordi Alba. Se puede empezar a buscar culpables pero la realidad más cruda es esa: había un lateral izquierdo muy bueno que lo tapaba.
Pero Cucurella se ha hecho un hueco, en esa mezcla de modelo de cantera blaugrana pasada por el filtro de Bordalás. No era puro para ninguno de los dos estilos, pero Luis de la Fuente lo ha colocado en primer plano y ha colaborado para que la imagen de este tipo con carisma haya subido en un torneo en el que la selección española ha dado la talla.
De la Fuente ha diseñado un equipo muy sólido en las bandas y equilibrado en el centro. Y ha confiado en el fútbol contundente y simple de un lateral izquierdo reconocible que aporta seguridad en una de las líneas básicas de la selección.
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