- Tres fundamentos para incluir el delicioso té de manzanilla con anís en tu rutina diaria
- Incorpora el té de manzanilla con anís a tu rutina diaria y disfruta de sus múltiples beneficios para la salud
- Propiedades del anís y la manzanilla
- Beneficios del té de manzanilla con anís
- Preparación y consumo del té de manzanilla con anís
Tres fundamentos para incluir el delicioso té de manzanilla con anís en tu rutina diaria
En el mundo de las bebidas saludables, el té de manzanilla con anís se ha convertido en una opción cada vez más popular. Y no es para menos, ya que esta deliciosa infusión ofrece una amplia gama de beneficios para la salud y el bienestar. Reducir el estrés y la ansiedad, mejorar la digestión y aumentar la calidad del sueño son solo algunos de los motivos por los que deberías considerar incluir este té en tu rutina diaria. A continuación, exploraremos tres fundamentos sólidos para hacer de este té una parte integral de tu día a día.
Incorpora el té de manzanilla con anís a tu rutina diaria y disfruta de sus múltiples beneficios para la salud
La alimentación balanceada es clave para mantener una buena salud, y conocer las propiedades de los alimentos que consumimos es fundamental para aprovechar al máximo sus beneficios. Las infusiones juegan un papel importante en este sentido. Entre las muchas opciones disponibles, el té de manzanilla con anís se destaca por su capacidad para aliviar distintos malestares.
Propiedades del anís y la manzanilla
El anís, conocido por su sabor dulce y ligeramente similar al regaliz, es más que un simple ingrediente culinario; es una fuente de minerales esenciales como el hierro y el potasio. La manzanilla, por su parte, aporta una rica combinación de vitaminas y minerales, creando así una mezcla ideal para promover el bienestar general.
Beneficios del té de manzanilla con anís
Tomar té de manzanilla con anís tiene todos estos beneficios para la salud:
Mejora la digestión: el anís, según una investigación realizada por el Centro de Investigaciones Biomédicas Victoria de Girón, posee propiedades antiinflamatorias y carminativas que facilitan la digestión. Estas propiedades también ayudan a eliminar los gases y a reducir la hinchazón abdominal. La manzanilla, por su parte, es eficaz para aliviar la indigestión, las náuseas y los ardores estomacales.
Regula el azúcar en la sangre: tomar infusión de manzanilla con anís puede ser beneficioso para el control del azúcar en la sangre. De acuerdo con Healthline, la manzanilla tiene propiedades antiinflamatorias que protegen las células del páncreas, responsable de la producción de insulina. El anís, gracias a su contenido de anetol, contribuye a regular los niveles de azúcar en la sangre.
Alivia el estrés y la depresión: esta infusión también es efectiva para combatir el estrés y la depresión. La manzanilla contiene apigenina, un antioxidante que ayuda a reducir el insomnio, mientras que los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos destacan su capacidad para disminuir la ansiedad. Además, Healthline menciona que el consumo de 200 mg de anís, tres veces al día, puede reducir significativamente los síntomas de la depresión.
Preparación y consumo del té de manzanilla con anís
Si buscamos un alivio rápido después de las comidas, lo mejor es consumir la infusión caliente justo después de comer. Para maximizar sus beneficios, es aconsejable tomar otra infusión a lo largo del día. Esto no solo ayuda a reducir la inflamación, sino que también contribuye a mantener el cuerpo bien hidratado.
Aunque las bolsitas de infusión son una opción cómoda y conveniente, no son la única alternativa disponible. La opción recomendada por distintos expertos en nutrición, es utilizar ingredientes frescos para preparar la infusión, ya que estos preservan mejor sus propiedades y beneficios. Para hacerlo, simplemente hierve agua, añade el ingrediente fresco y deja infusionar durante 15 minutos. Luego, permite que repose otros 5 minutos antes de colar.
Como no siempre es posible tener ingredientes frescos a mano, la siguiente mejor opción es utilizar infusiones a granel. Estas suelen ofrecer una mayor calidad que las de bolsa, ya que el proceso de embolsado puede provocar la pérdida de algunas vitaminas y minerales. Además, las infusiones a granel permiten ajustar la dosis según el gusto y obtener un sabor más intenso. Sin embargo, si estas opciones no están disponibles, las bolsitas de infusión pueden ser una buena elección, ya que suelen conservar muchas propiedades y son prácticas en situaciones de prisa.
Es importante tener en cuenta que esta información no sustituye en ningún caso al diagnóstico o prescripción por parte de un médico. Es importante acudir a un especialista cuando se presenten síntomas en caso de enfermedad y nunca automedicarse.
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