Luna Rossa supera una avería que la llevó a la descalificación y luego logra el empate 2-2
En un giro sorprendente de los eventos, Luna Rossa ha logrado recuperarse de una avería técnica que la llevó a la descalificación en una de las regatas previas. Sin embargo, el equipo italiano no se rindió y, con una gran determinación, consiguió volver al juego y lograr un empate 2-2 en la competición. Esta remontada es un gran logro para la tripulación de Luna Rossa, que demuestra su capacidad para sobreponerse a las adversidades y luchar hasta el final. Ahora, la competición está más empatada que nunca, y los aficionados se preguntan qué pasará en las próximas regatas.
Luna Rossa recupera el equilibrio después de una avería que la llevó a la descalificación
Este domingo, la final de la Louis Vuitton Cup vivió un mediodía-tarde magnífico, con una hora de retraso y tras la incidencia italiana en la primera ‘race’ del día. El viento soplaba a más de 20-21 nudos, al límite, y la pre-salida y salida fue ajustadísima.
Luna Rossa ganó la batalla por muy poco, marcando desde ese momento territorio. Ambos AC75 iban con un cuchillo en la boca, al límite los dos, y con varias protestas sin éxito de los británicos. Era la flema (británica) contra la pasión (italiana). La distancia no superaba entonces los 50 metros.
El viento estaba justo por encima de los 20 nudos y la velocidad que alcanzaban las embarcaciones, de 50 nudos, una barbaridad. Se jugaban mucho ambos equipos, unos para abrir hueco en el marcador y los otros para igualar la serie. No había tregua en ninguno de los tramos (la ‘race’ era a un total de ocho).
En la tercera ceñida (quinto tramo) Luna Rossa cogió distancia. Desde la tender italiana se valoró positivamente cómo estaban navegando Jimmy Spithill y Francesco Bruni. Eran ya 350 metros de distancia, muy buen control de la ‘race’ a cargo de los azzurros, que se tradujo en 19” de ventaja y 400 metros. ¡Los italianos superaron los 100 kms/hora!
Pero la tripulación liderada por INEOS quiso vender muy cara su derrota, y después de pasar con solo 6” de desventaja en la penúltima puerta no pudo dar alcance a Luna Rossa por muy poco. Le quiso poner nervioso para que forzara error en una empopada con una lucha tremenda, cerrada, que se tradujo en un increíble final de ‘race’, solo 4” de ventaja para la ‘bala de plata’ italiana y el 2-2 en el marcador.
Júbilo transalpino en la fanzone. No era para menos tras el serio contratiempo vivido en la primera ‘race’ del día. Luna Rossa Prada Pirelli intentando reparar un problema con las velas que requirió asistencia y le acabó costando la descalificación en la primera 'race' del día.
Un problema con las velas que requirió asistencia técnica en alta mar. Una avería de última hora con un peaje muy alto. Luna Rossa fue descalificado porque había personal (que no era tripulación) a bordo del AC75. Punto para los británicos que vino a compensar el del día anterior cuando iba mandando en la tercera ‘race’, bajó el viento, se quedó clavado y no pudo concluir dentro del tiempo límite.
Ahora, la serie está empatada a dos, y la tensión y la emoción siguen en alto en la Louis Vuitton Cup.
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