La Supercopa estrena el año con un partido marcado por desigualdades
El año deportivo ha comenzado con un partido electrizante en la Supercopa, que ha puesto en escena las desigualdades existentes entre los equipos participantes. La primera cita del año en este torneo ha sido testigo de una gran disparidad en cuanto a la calidad del juego, la estrategia y la intensidad mostrada por los jugadores en el campo. A pesar de la ilusión inicial, el encuentro ha terminado con un resultado abultado que refleja la gran brecha que separa a los equipos. En este sentido, la Supercopa ha demostrado ser un espejo que refleja la realidad del fútbol actual, donde los equipos más potentes siguen dominando la escena.
La Supercopa estrena el año con un partido marcado por desigualdades y polémica arbitral
El triunfo final del Unicaja de forma brillante en la final de la Supercopa rompió la dinámica de victorias del Real Madrid de los últimos años, pero hay cosas que no han cambiado en la ACB en este inicio de nuevo curso y una de ellas es la polémica arbitral.
El momento inicial de la temporada atenúa las críticas, pero el recelo sobre supuesto trato de favor al Madrid vuelve a estar presente. Aunque el diferencial de tiros libres lanzados en los partidos del Madrid en los últimos años ha sido notable en favor de los blancos, los dos partidos de Murcia han batido todos los récords.
Desigualdad en tiros libres
En la semifinal ante el Barça (89-83), los de Chus Mateo lanzaron 31 mientras que los azulgrana se quedaron en 13 y eso dio pie a críticas ya en el túnel de vestuarios. Nico Laprovittola, base del Barça, dijo que su equipo “no había perdido por los árbitros”, pero lanzó una pulla al añadir que esperaba que más adelante se “vieran cosas” que no se vieron.
El técnico Joan Peñarroya fue algo más explícito: “En cuanto a la diferencia de tiros libres, es muy pronto para calentarme, pero no estoy contento de que el Real Madrid haya anotado 14 de los 22 puntos del último cuarto en el tiro libre. La diferencia de tiros libres parece demasiado excesiva”.
La final, un partido marcado por la polémica
La situación fue a más en la final aunque Unicaja puso sobrevivir a ello para imponerse al final por 80-90. En ese partido por el título los blancos volvieron a repetir 31 tiros libres lanzados y Unicaja se quedó en 8. Tras verse abajo por 17 puntos al final del primer cuarto, los blancos se beneficiaron nada menos que de 15 viajes a la línea de 4,60 solo en el segundo cuarto.
“Ellos empezaron a lanzar tiros libres y el partido fue otro”, dijo el entrenador del Unicaja, Ibon Navarro, que tras la victoria no quiso entrar más en polémica.
Reacciones y críticas
Durante el partido, sin embargo, sí que se le vio indignado con los árbitros como se puede comprobar en un vídeo con audio difundido por ACB con el colegiado Carlos Peruga, el principal, como protagonista.
“¡5-18 en tiros libres!”, exclamaba Navarro a Peruga en un momento del partido, lo que le valió una técnica por protestar (y consiguientemente un tiro libre más para el Madrid). Previamente también Alberto Díaz, base del equipo andaluz, había reclamado al árbitro la diferencia. Peruga le contestó: “A mí no me hables de que van 1-5 porque antes ha sido al revés. Dependerá de vosotros”.
La emisión del vídeo generó también descontento en alguno de los protagonistas. El base de Unicaja Kendrick Perry no se calló en la red social ‘X’ señalando el distinto tipo de diálogo que mantuvieron los árbitros con unos y otros. “Observen las conversaciones que tiene con otros jugadores versus las conversaciones que tiene conmigo”, escribió Perry.
Una tendencia registrada
En cualquier caso, la crítica sobre el criterio arbitral en faltas en los partidos del Madrid no es nueva sino una tendencia registrada las últimas dos campañas. La pasada temporada el Madrid fue de largo el equipo con mejor diferencial entre tiros libres lanzados a favor y lanzados por el rival con una media de +6,5 por partido.
Dos de los partidos más decisivos de la temporada en el ámbito ACB se saldaron con triunfo del Real Madrid pero también con polémica arbitral. Así fue en la final de Copa de Málaga, donde los blancos se impusieron al Barça por 96-85, con ‘cabreo’ de los azulgrana por el trato arbitral recibido. Situación similar se vivió en la jornada 25 en un Unicaja-Madrid. Los blancos se impusieron por 81-87, conservando el liderato e igualando el ‘average’ pero con un diferencial de faltas (12-21) que desató la ira del técnico de Unicaja en el túnel de vestuarios.
“Estoy muy cabreado porque el equipo ha hecho un esfuerzo brutal, quiero pensar que nos han ganado por el rebote”, dijo.
Hace dos campañas cifras parecidas ya provocaron alguna polémica encendida como la que protagonizó el técnico del UCAM, Sito Alonso, que en el partido jugado en Murcia ante el Madrid decidió colocar una pizarra en la pista bien visible con una cifra, 26-1, en referencia a los tiros libres lanzados por uno y otro equipo y en cierto momento del partido (la diferencia llegó a ser de 29-1)
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