La resurrección de Wiseman: del equipo de los Pistons al de los Pacers, el número 2 del draft vuelve a brillar
Después de un largo período de inactividad, James Wiseman, el jugador que fue seleccionado como número 2 del draft en 2020, ha logrado renacer en su carrera profesional. Tras un complejo traspaso del equipo de los Pistons a los Pacers, Wiseman ha encontrado nuevamente su rhythm de juego, lo que ha llevado a los aficionados y expertos a hablar de una auténtica resurrección. Con una serie de destacadas actuaciones, el joven pívot ha demostrado que sigue siendo un jugador de alto nivel, capaz de dominar en la cancha y llevar a su equipo a la victoria. ¿Será esta la oportunidad que Wiseman necesitaba para afianzar su lugar en la élite de la NBA?
Wiseman resurge en Indiana: el número del draft vuelve a brillar con los Pacers
James Wiseman ve por fin la luz después de caer a lo más hondo en lo que ha sido una abrupta caída del número 2 del draft de 2020. Los Indiana Pacers han firmado al pívot de 23 años por dos temporadas después de un oscuro año y medio en los Detroit Pistons.
Traspasado en febrero de 2023 de los Warriors -entonces campeones reinantes-, al peor equipo de la NBA, Wiseman no era ni titular en unos Pistons en los que apenas jugó 17 minutos por encuentro. Sin embargo, el interior ve cómo su prometedora carrera puede resurgir de la mano de los divertidos Pacers, una de las revelaciones de la temporada pasada llegando a las Finales de Conferencia 10 años después y uno de los equipos de la NBA con un estilo de juego más atractivo basado en el ritmo y el pase.
La segunda oportunidad de Wiseman: del desastre en Detroit al renacimiento en Indiana
El conjunto de Indianápolis fue de hecho el segundo mejor ataque del pasado curso, solo por detrás de los Boston Celtics. Wiseman, con Curry en su etapa en los Warriors, es un pívot clásico de 2,11 que encaja perfectamente en estos Pacers, en los que se espera que sea el ‘5’ de apoyo de Myles Turner, que puede jugar más por fuera con su mayor rango de tiro mientras que Wiseman puede actuar más en la pintura.
Características complementarias que ofrecen también a Rick Carlisle la posibilidad de jugar con ambos a la vez en un quinteto con grandes. Con la continuidad de Pascal Siakam y Obi Toppin aseguradas, más Isaiah Jackson, Indiana apuntala su juego interior en un equipo que volverá a liderar Tyrese Haliburton.
Wiseman promedió 7 puntos, 5,3 rebotes y 1 asistencia con un 61% en tiros de campo el año pasado en Detroit. Wiseman, con la presión que siempre pesa sobre una elección alta del draft, tuvo que lidiar con una etapa de contrastes en los Warriors, con los que ganó el anillo de 2022 pese a no jugar aquella temporada por lesión de menisco en abril de 2021.
El conjunto de San Francisco veía al interior como su pívot de futuro, pero Wiseman sufrió una lesión que le mantuvo fuera la entera campaña 22-23. Eso frenó su progresión en unos Warriors sin tiempo para adaptar a sus jóvenes en ese difícil equilibrio que han intentado mantener entre contender y reconstruir.
El estancamiento del pívot de Tennessee era evidente sobre todo en defensa, con su a veces excesiva lentitud y una impulsividad que le llevaba a cargarse de faltas. Pero el desencadenante de su traspaso a los Pistons fue que la mejora de su contrato suponía un problema más para una masa salarial ya disparada.
Wiseman tiene también que trabajar aún el tiro exterior. Pero tendrá margen para mejorar con Myles Turner asumiendo la presión de ser el pívot titular en estos jóvenes Indiana Pacers, en los que el pívot vuelve a ver la luz tras haber ido a parar a las catacumbas de la NBA.
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