Entre la contradicción y la incertidumbre: El sistema en entredicho
En un contexto de incertidumbre y confusión, el sistema se encuentra en el ojo del huracán. La contradicción entre las diferentes partes involucradas ha generado un clima de inestabilidad y duda. La falta de claridad en la toma de decisiones y la ambigüedad en las políticas han llevado a cuestionar la eficacia del sistema en su conjunto. En este artículo, analizaremos las causas y consecuencias de esta situación y exploraremos las posibles soluciones para salir de este laberinto de incertidumbre.
La duda en el Atlético: ¿5-3-2 o 4-4-2?
El Atlético de Madrid vivió una jornada de dos caras el domingo en el Estadio de Vallecas frente al Rayo. En la primera parte, el equipo madrileño se vio superado por el conjunto franjirrojo, que se adelantó con un gol de Isi Palazón. Sin embargo, tras el descanso, los colchoneros dieron un paso adelante, marcaron el tanto del empate nada más salir del vestuario (obra de Conor Gallagher) y estuvieron más cerca de la victoria que en los 45 minutos iniciales.
Este cambio en el Atlético coincidió con la modificación realizada por Diego Simeone en lo que al sistema se refiere. El equipo madrileño pasó de jugar con un 5-3-2, el habitual, a un 4-4-2, el empleado por el técnico durante la mayor parte de su etapa en el banquillo rojiblanco.
El sistema en entredicho
Esta permuta permitió al equipo presionar más arriba, ganar un efectivo en el centro del campo (perdiéndolo en la defensa, obviamente), lo que permitió controlar el juego y tener más presencia en campo rival. Cierto es que el Rayo, que realizó un brutal desgaste en el primer acto, tampoco tenía ya el empuje de antes, lo que favoreció el propósito del técnico, que además metió jugadores de carácter ofensivo en el campo, llegando a jugar a la vez con Sorloth, Julián Alvarez, Correa y Griezmann.
La duda es si Simeone seguirá apostando por el 5-3-2 o si dará una oportunidad desde el inicio al 4-4-2, algo que muchos aficionados vienen reclamando desde hace tiempo. La seguridad que ofrecen Robin Le Normand y José María Giménez en el centro de la zaga puede hacer que el argentino se decida a apostar por esta segunda opción, aunque lo cierto es que tendría que recolocar más piezas y encajarlas en este sistema.
Por ejemplo, Samu Lino, dueño habitual del carril izquierdo, que con un 4-4-2 tendría que adelantar su posición, con Reinildo como lateral. En el derecho, Marcos Llorente podría seguir en esa demarcación.
Versatilidad y adaptación
En cualquier caso, la versatilidad de algunos futbolistas y el propio carácter de Simeone, intervencionista en este sentido y muy dado a utilizar varios esquemas en el mismo partido, invitan a pensar que el entrenador seguirá alternando ambos en función del rival o del estado del propio Atlético.
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