El piragüismo español trabaja en un plan para ganar medallas en Los Ángeles y Brisbane

El piragüismo español trabaja en un plan para ganar medallas en Los Ángeles y Brisbane

El piragüismo español se encuentra en un proceso de renovación y reestructuración con el objetivo de alcanzar el éxito olímpico en los próximos eventos multideportivos. En este sentido, la Federación Española de Piragüismo ha diseñado un ambicioso plan para lograr medallas en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 y los Juegos Paralímpicos de Brisbane 2032. Este proyecto se centra en la detección y desarrollo de talentos, la mejora de la preparación física y técnica de los deportistas, así como la optimización de los recursos disponibles. Con este plan, el piragüismo español espera positionedarse entre los mejores del mundo y conquistar prestigiosas medallas en los próximos eventos internacionales.

Piragüismo español mira a Los Ángeles y Brisbane con un nuevo plan de medallas

El presidente de la Real Federación Española de Piragüismo (RFEP), Javier Hernanz, ha confirmado que, tras concluir los Juegos Olímpicos de París 2024, ya se está trabajando en un nuevo proyecto que abarcaría los dos siguientes ciclos olímpicos.

«Estamos diseñando ya un nuevo proyecto de cara, no solo a los Juegos de Los Ángeles 2028, sino también en el horizonte de Brisbane 2032», señaló el dirigente asturiano.

Balance de los Juegos Olímpicos de París 2024

Sobre el balance de los recientes Juegos, Hernanz señaló que fueron «excepcionalmente satisfactorios», igualándose el registro de medallas de anteriores citas, con tres preseas, dentro de un gran tono general de todo el equipo, con dos cuartos puestos, un quinto y alguna decisión como la descalificación a Manuel Ochoa que también podría haber subido al podio.

«Se han conseguido muy buenos resultados y el piragüismo sigue siendo, junto con el atletismo, el deporte que más medallas ha aportado al deporte español, lo que demuestra su estabilidad», insistió.

La figura de Saúl Craviotto

Para el presidente, la figura de Saúl Craviotto, abanderado de la representación española en Tokio 2020, cediendo el testigo en París 2024 a su compañero Marcus Cooper, es «inigualable y un ejemplo que con casi 40 años haya competido con la misma intensidad, llevando a sus compañero en busca de un oro hasta los últimos metros, aunque se quedaran con el bronce a tan solo dos décimas de la victoria».

«Confío en la continuidad del deportista español con más metales -seis- porque le recomendaría que no va a ser más feliz fuera de la piragua que en ella, si es que finalmente decide abandonar la alta competición».

Plan de futuro

Hernanz destacó la intención de la Federación Española de «detectar talento y centrarse, no solo en el apoyo y respaldo a los piragüistas que actualmente se encuentran en la alta competición, sino también buscar, a través de la tecnificación, que puedan surgir nuevas generaciones que tomen en un futuro el relevo».

El máximo dirigente de la Real Federación Española de Piragüismo destacó, como logros durante su gestión, la labor desarrollada por entrenadores itinerantes para la especialidad de slalom, con el fin de conseguir una mayor difusión de este deporte que se ha traducido en que, en el último campeonato de España de jóvenes promesas se pasara de la participación de 6 a 22 clubes.

«Si así fuera siempre tendrá la puerta abierta de la Federación para estar a mi lado», recalcó.