El misterio detrás de la trágica desaparición de Pau Cubells
La comunidad deportiva se encuentra conmocionada tras la súbita y misteriosa desaparición del joven futbolista Pau Cubells. El talentoso jugador, que había destacado en las filas del equipo juvenil del FC Barcelona, desapareció sin dejar rastro en la noche del pasado 10 de febrero. Desde entonces, la familia y amigos del desaparecido han estado buscando respuestas sobre su paradero, pero todas las pistas han llevado a un muro de silencio. En este artículo, exploraremos las circunstancias enigmáticas que rodean la desaparición de Pau Cubells y las investigaciones que se llevan a cabo para esclarecer este misterio.
A punto de título, el Barça sufre un golpe emocional con la desaparición de Pau Cubells
El Barça es líder. 12 de 12 puntos. Le saca cuatro puntos al Madrid en cuatro jornadas. Hansi Flick es un héroe, Lewandowski las enchufa y el capitán Raphinha incluso marca un ‘hat-trick’. A Julio Tous, el preparador físico, se le hacen entrevistas en los medios del club, algo nunca visto. Y se ha puesto de moda decir que Laporta puede estar tranquilo porque mientras la pelotita entre, él tiene la continuidad asegurada.
Y, además, el fichaje estrella, Dani Olmo entró como un trueno en el equipo. No se recuerda otro recién llegado con un rendimiento tan alto en partido y medio. Todo esto es ilusionante. Y tan cierto como que, en el fútbol, las cosas van del canto de un duro.
Porque más allá de golear al Valladolid y de remontar en Vallecas y de sudar de lo lindo para derrotar al Athletic, que lleva 11 años sin puntuar en Barcelona y 23 sin ganar, LaLiga empezó con una jugada clave en Mestalla.
El punto de inflexión fue la salvada de Cubarsí, en la línea de gol, con Ter Stegen ya batido, que significaba el 2-0 justo antes del descanso. El Barça estaba en plena pájara. En tres minutos recibió un tanto, anulado por el VAR, y Cubarsí obró el milagro al sacar el remate de Hugo Duro, que ya se cantaba como gol en Mestalla. La salvada del año.
En el tiempo añadido, asistencia de Lamine Yamal, el empate de Lewandowski y, hasta hoy, la felicidad absoluta. Salió cara. De no ser por la proeza del central de 17 años, quizá el proyecto de Flick pintaría menos sólido de lo que ahora parece.
Ya sabemos que, “en el fútbol, si el balón que da en el poste y entra, eres un fenómeno. Y si va al poste y sale fuera, eres una mierda”. No hacía falta que Di Stéfano dijese esta frase de Perogrullo. La fortuna también juega. Y que dure.
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