Desastroso empate para el Manchester City

Desastroso empate para el Manchester City

La última jornada de la Premier League ha dejado un sabor amargo en el Manchester City, que no pudo hacer valer su condición de favorito en el partido contra el Newcastle United. El encuentro terminó en un empate 2-2, resultado que deja al equipo de Pep Guardiola con un mal sabor de boca. A pesar de la excelente actuación de Sergio Agüero, que marcó dos goles, el Manchester City no pudo mantener la ventaja y permitió que los 'Magpies' igualaran el partido en el minuto 80. Este resultado es un golpe duro para el equipo ciudadano, que ve cómo se aleja su oportunidad de optar al título.

Desastroso empate para el Manchester City: la justicia y la rivalidad se ciernen sobre el club

El autocar del Manchester City se pasea en cada jornada por las ciudades y campos ingleses luciendo, en su parte trasera, una orgullosa bandera con un lema victorioso: ‘4-in-a-row’ (‘Cuatro títulos consecutivos’). La superioridad del equipo que dirige Pep Guardiola ha resultado insultante para todos los clubs ingleses y el club mancuniano ha querido loar su gesta, se esfuerza en enaltecerla, sabiendo que tardará mucho tiempo en repetirse.

Tiene, sin embargo, encima un proceso oscuro de sombras: 115 supuestas infracciones financieras, que esta semana se han empezado a juzgar, en el llamado ‘Trial of the Century’ (‘juicio del siglo). Sobre el césped, el Arsenal que dirige Mikel Arteta encarna ahora las ganas de acabar con el ciclo victorioso del City.

La Premier League aprieta el brazo al Manchester City: infracciones financieras en juego

En lo deportivo, el Arsenal es el mejor colocado, junto al Liverpool, y firme candidato a poder destronar al irreductible campeón, después de dos temporadas en las que se ha acercado mucho. Ha construido una defensa muy eficaz para lograrlo, la mejor del fútbol inglés. Los ‘gunners’ se presentan el domingo, en el Etihad de Manchester, mental, moral y físicamente reforzados para ganarle.

Pero fuera del campo, en los despachos y los palcos de los estadios, los rivales del City son más numerosos. Hay una corriente de opinión muy adversa en contra del humillante campeón. Y son muchos los dirigentes de clubs ingleses que sostienen que la deducción de puntos para el City sería “insuficiente”, si es declarado culpable de alguno de los cargos por irregularidades económicas.

El City se enfrenta a su mayor desafío: destronar al Arsenal y superar la crisis judicial

Aunque el club controlado por el fondo Abu Dhabi United Group se ha declarado inocente de todos los cargos, ha sido ese fuerte ruido exterior, que presagia un castigo para el laureado club de Manchester, el que perturba y ha hecho defenderse a Pep Guardiola: “Ya nos han juzgado. Pero todo el mundo es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad. Así que ya veremos”.

Secretismo Los clubs de la Premier se han sentido frustrados por el secretismo que rodea la audiencia en el Centro Internacional de Resolución de Disputas de Londres. Son muchos los clubs que opinan que el caso hubiera debido celebrarse en público para aportar claridad y actuar como un precedente para futuros controles.

La expulsión de la Premier League está en un extremo de los poderos del tribunal. La falta de información compartida ha indignado a los clubs de la Premier League, que ya saben que los costes legales de apelación, si los hubiera, como ocurrió con el caso del Everton, ascenderán a varios millones, y les van a ser deducidos de los derechos de transmisión televisiva y fondos comerciales de los clubs.

Y es que el juicio al City supera todo lo previsto. En un rincón está la Premier League, la liga más popular del mundo y exportadora de imagen exitosa del Reino Unido. En el otro, el club que ha dominado la liga inglesa de manera abrumadora, incluida esa racha ininterrumpida de cuatro títulos consecutivos que nunca había sucedido antes.

La audiencia, que se espera que dure alrededor de 10 semanas, involucrará a algunos de los mejores letrados del país. La Premier acusa al City de incumplir las normas de financiación de la liga inglesa durante nueve temporadas consecutivas (2009/10 a 2017/18) y está decidida a llegar hasta el final para que su autoridad quede preservada.

El juicio llega, además, en un momento crítico, ya que el Gobierno de Keir Starmer está tramitando la ley que permitirá un regulador financiero, en contra de las advertencias y amenazas de la UEFA.

El ‘combate’ deportivo

Justo en este momento de tensión, el domingo llega el Arsenal al Etihad Stadium de Manchester, en el que se prevé un ambiente sobrecargado en las gradas. Los londinenses tendrán otra oportunidad de certificar su evolución, agarrados a su perfeccionismo en los detalles, especialmente en las jugadas a balón parado.

Tras el inesperado pinchazo frente al Brighton, los ‘gunners’ vuelven a estar por detrás, a solo dos puntos, y éste es su momento para desbancar al City, antes de que el equipo de Guardiola emprenda la directa. Puede animarles el 0-0 que logró el Inter, el miércoles en la Champions League. El City dominó el juego y el balón, pero sin profundidad ni acierto.

También aquel empate sin goles del Arsenal en el Etihad, en marzo, había sido dado por bueno en ese momento. Luego resultó no ser suficiente. Pensando ya en acercarse a la barrera de los 100 puntos, los ‘gunners’ están obligados esta vez a ganar al City en su estadio.

Siguen contando con la defensa más firme de la Premier, a pesar de que no podrán alinear ni a Declan Rice (sancionado) ni a su líder y lesionado capitán, Martin Odegaard. El secreto de su posible éxito estará, de nuevo, en como frenar a Haaland. Lleva ya el noruego nueve goles en la Premier, en cuatro partidos, cifra sin precedentes en los inicios de la liga inglesa, a ritmo de récords, pero se enfrentará a los mejores centrales de la liga, Gabriel Magalhães y William Saliba, duelo que decantará inevitablemente el partido.

En el campo, frente al Arsenal, y fuera de él, en los juzgados de Londres, el City encuentra ahora amenazas y adversarios por todas partes. Quieren destronarle y está en juego el poner fin a ese orgulloso ‘4-in-a-row’ del que presumen los ‘skyblues’. Con el futuro del club pendiente de las renovaciones de Guardiola, Haaland, De Bruyne y Rodri, todas muy en el aire, se detecta un ansia por destruir al equipo hegemónico de la Premier, obligado a vivir unos duros seis meses de exámenes, deportivos y extradeportivos. Todos van ya al ataque contra el Manchester City.