Alberto García, central del equipo, ve finalizada su temporada
La noticia ha causado conmoción en el mundo del fútbol. Alberto García, el central del equipo, se ve obligado a poner fin a su temporada debido a una lesión que no ha respondido a los tratamientos. La pérdida del jugador es un duro golpe para el equipo, que cuenta con él como uno de sus pilares fundamentales. García ha sido clave en la defensa del equipo durante toda la temporada, y su ausencia se sentirá en los próximos partidos. Aunque la lesión no es grave, el tiempo de recuperación impide que el jugador vuelva a las canchas antes de que finalice la temporada. El equipo ya está buscando opciones para reemplazar a García y minimizar el impacto de su ausencia.
La mala suerte se ceba con Alberto García, central del Vilassar Mar
Se confirmaron los peores pronósticos. La mala suerte se cebó con el central del Vilassar Mar, Alberto García, que en el primer partido de liga contra el Manresa se lesionó de gravedad.
Sufre rotura de ligamento cruzado de la rodilla derecha y está pendiente de que baje la inflamación para saber si tiene afectado el menisco también.
Lo que sí es seguro es que el próximo 25 de octubre pasará por quirófano y que ha dicho adiós a la temporada y, a sus casi 36 años, probablemente también al fútbol en activo: “Es, afortunadamente, mi primera lesión grave. Ha llegado al final de mi carrera y eso, si es que tiene que llegar, es casi mejor, porque ya he hecho todo lo que tenía que hacer en el fútbol. Nunca puedes decir nunca, pero es muy difícil que vuelva a jugar. Con 36 años, ya no es solo cómo me vaya a quedar la rodilla, sino la forma física y la edad, que también pesa”.
Un clásico de la categoría
Alberto García salió del fútbol base del L'Hospitalet. Nada más acabar su etapa de formación se marchó a Almería, para jugar en el filial del Poli Ejido. Tras un año allí, volvió a Catalunya para enrolarse en el Masnou en Primera Catalana. Tras un año y medio, se marchó al Castelldefels, a Tercera. Tras dos años y medio se marchó al Terrassa (3ª División) y en la siguiente temporada al Martinenc, donde consiguió el ascenso a Tercera.
Su siguiente destino fue la Montañesa (3ª) y tras dos temporadas, se enroló en el Cerdanyola, equipo con el que subió Segunda Federación. De ahí pasó al Vilassar Mar y en el conjunto del Maresme cumplía este año su cuarta temporada.
El futuro en el aire
Tras el reciente cambio en su rutina futbolística, Alberto, que es técnico de calderas, no tiene claro qué le deparará el futuro: “Quiero seguir vinculado al fútbol, eso lo tengo seguro, pero aún no sé de qué manera. Por el momento, te toca “descansar y disfrutar de mi familia”.
Alberto tiene dos hijos, uno de ellos, el mayor, de 5 años, ya empieza a practicar fútbol, así que cerca del balón, seguro que va a continuar.
Una carrera larga y fructífera se ve truncada por una lesión grave, pero Alberto García tiene la esperanza de seguir ligado al fútbol de alguna manera.
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