Tres comidas en la infancia que pueden aumentar el riesgo de desarrollar diabetes

Tres comidas en la infancia que pueden aumentar el riesgo de desarrollar diabetes

La diabetes es una enfermedad crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo, y según una investigación reciente, los hábitos alimenticios en la infancia pueden jugar un papel crucial en el desarrollo de esta condición. En este sentido, se han identificado tres comidas que, si se consumen de manera regular durante la niñez, pueden aumentar significativamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en la adultez. Estas comidas, que podrían parecer inofensivas a primera vista, pueden tener un impacto negativo en el metabolismo y el sistema hormonal de los niños, lo que a largo plazo puede desencadenar la enfermedad.

La dieta infantil: el secreto detrás del creciente número de casos de diabetes tipo 1

La diabetes tipo 1 es una enfermedad grave que requiere de tratamiento de por vida. Se desarrolla a partir de que el sistema inmune “ataca” las células que forman la insulina (hormona) en el páncreas.

La destrucción de las células de los islotes pancreáticos hace que la producción de insulina sea escasa o nula, lo que complejiza la regulación adecuada de los niveles de azúcar en sangre.

La diabetes tipo 1 alcanza al 10% de las personas diabéticas, incluyendo niños y adolescentes, siendo que alrededor del 90% de los pacientes padece diabetes tipo 2, según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades.

Específicamente, la diabetes tipo 1 es la forma más común de diabetes en niños, y lo que está encendiendo las alarmas es el rápido crecimiento de casos, al punto que se prevé para 2040 pasar de 8,4 millones en 2021 a 17,4 millones de infantes con esta condición.

El impacto de la dieta en el desarrollo de la diabetes tipo 1

A raíz de esta situación preocupante, investigadores están estudiando el impacto de factores ambientales en el desarrollo de la diabetes tipo 1, lo que supone la posibilidad de implementar estrategias para prevenir la enfermedad y, por ende, sus complicaciones.

Un nuevo estudio de Finlandia puso el foco en la dieta de los más pequeños, vinculando el desarrollo de diabetes tipo 1 en miles de niños finlandeses con el consumo de 3 alimentos puntuales.

Los alimentos que pueden aumentar el riesgo de diabetes tipo 1

Según el estudio, comer abundante fruta, avena y centeno en la infancia puede aumentar el riesgo de diabetes tipo 1;

mientras que consumir bayas (arándanos rojos, frambuesas y grosellas negras) reduce las probabilidades de desarrollar la enfermedad.

Las bayas son especialmente ricas en polifenoles, unos compuestos vegetales que pueden reducir la inflamación asociada al desarrollo de la diabetes tipo 1.

Por otro lado, alimentos como la avena, los plátanos y los productos lácteos (como el yogur) y el trigo se asocian a una mayor probabilidad de desarrollar autoinmunidad de los islotes;

mientras que alimentos como la coliflor, el repollo y el brócoli, se vinculan con un menor riesgo.

Detectar la diabetes tipo 1 en niños

La detección temprana de esta enfermedad es crucial, ya que el cuerpo del niño no produce insulina.

Esta enfermedad no tiene cura, pero sí puede tratarse.

Algunos de los signos y síntomas asociados a la diabetes tipo 1 son:

1. Aumento de la sed.

2. Orinar con frecuencia, incluso mojar la cama.

3. Hambre extrema.

4. Pérdida de peso involuntaria.

5. Fatiga.

6. Irritabilidad o cambios de comportamiento.

7. Aliento con olor a fruta.

Esta información no sustituye en ningún caso al diagnóstico o prescripción por parte de un médico. Es importante acudir a un especialista cuando se presenten síntomas en caso de enfermedad y nunca automedicarse.