La Liga Francesa Reelecta a su Presidente a Través de la Crisis Económica que Afecta a los Clubes
En un contexto de incertidumbre económica, la Liga Francesa de Fútbol ha decidido reelegir a su presidente, confiando en su capacidad para guiar a los clubes a través de la crisis financiera que les afecta. A pesar de las dificultades que enfrentan los equipos franceses, la Liga ha optado por mantener la estabilidad y la continuidad en la dirección, en lugar de buscar un cambio de rumbo. La reelección del presidente se produce en un momento clave para el fútbol francés, que busca superar los desafíos financieros y mantener su posición en el panorama internacional.
La LFP reelecta a Labrune pese a crisis económica en el fútbol francés
Vincent Labrune ha sido ampliamente reelegido como presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de Francia, a pesar de la delicada situación económica que atraviesan varios clubs, agravada por el acuerdo a la baja por sus derechos televisivos.
Elegido inesperadamente en 2020, el expresidente del Marsella recolectó el 85 % de los votos en la Asamblea General de los clubs profesionales celebrada en París, por lo que amplía su mandato hasta 2028. Cyril Linette, el antiguo ejecutivo de Canal + y de L'Équipe, fue el único rival de Labrune.
Un acuerdo muy a la baja
Los representantes de los clubs decidieron respaldar a su presidente a pesar de que el acuerdo para la retransmisión televisiva del periodo 2024-2029 se quedó en 660 millones de euros por temporada, muy por debajo de los 1.000 millones esperados.
La mayor parte de los ingresos de los clubs franceses (entre 50 y 75 %) proceden de la venta de sus derechos de televisión. Varias entidades han reconocido que sus cuentas de este año empeorarán por ese acuerdo, forzándoles a vender jugadores y rebajar salarios, en suma repercutiendo en su nivel competitivo.
Es importante destacar que los otros cuatro grandes campeonatos en Europa ingresan mucho más que el francés: Inglaterra (unos 4.000 millones por curso), España (unos 2.000), Alemania (1.250) e Italia (900 millones).
Labrune, de 53 años, logró sin embargo renovar la confianza de los clubs asegurando que nadie lo habría hecho mejor que él, teniendo en cuenta que heredó una LFP en plena tormenta financiera tras la tumultuosa salida del grupo español Mediapro como difusor, que en 2018 se había comprometido a pagar 1.153 millones de euros por temporada entre 2020-2024.
Los puntos destacados de su gestión
También destacó de su gestión el pacto para dar liquidez a los clubs al ceder el 13,04 % de la sociedad comercial de la LFP al fondo de inversión luxemburgueso CVC Capital Partners a cambio de 1.500 millones de euros, acuerdo que fue investigado por el Senado francés.
También presumió de haber atraído a la multinacional de comida rápida McDonald's como patrocinador principal de la Liga a cambio de 30 millones por año.
El acuerdo de Labrune más criticado, el de la retransmisión televisiva, contempla que el canal británico DAZN y el catarí BeinSports difundan ocho y un encuentro por jornada, respectivamente.
La cadena británica DAZN propuso un abono mensual que creó malestar por su precio, 29,99 euros mensuales. Sin embargo, ante la avalancha de críticas y de conexiones piratas, la cadena británica lanzó esta semana una promoción para abonarse por 19,99 euros.
La reelección de Labrune como presidente de la LFP es un respaldo a su gestión, a pesar de la difícil situación económica que enfrenta el fútbol francés.
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