¿Quién puede frenar a Erling Haaland?

¿Quién puede frenar a Erling Haaland?

El fútbol europeo se pregunta ¿quién puede frenar a Erling Haaland?, el delantero noruego que ha revolucionado el mundo del fútbol con sus impresionantes cifras goleadoras. Con solo 21 años, Haaland ha demostrado ser un verdadero fenómeno, anotando gol tras gol en las competiciones más importantes. Su velocidad, potencia y capacidad de finishing lo han convertido en un arma letal en el área. Los equipos más importantes de Europa han intentado frenarlo, pero el joven noruego sigue dejando atrás a defensas y marcando goles con facilidad. ¿Quién puede detener su avance? ¿Qué estrategias pueden implementar los equipos para contener su devastador poder ofensivo? En este artículo, exploraremos las posibles respuestas a estas preguntas.

La máquina de gol de Haaland: ¿Podrá alguien frenar su carrera goleadora en la Premier League?

En la Premier League ya hay una clara evidencia de que el Manchester City juega con cierta ventaja. Además de tener todas las mejores cartas, nadie tiene un delantero como Erling Haaland, el ‘as’ de la baraja en el fútbol inglés. El noruego irrumpe en cada partido con la fuerza de un búfalo y la velocidad de un felino para ser determinante con sus goles.

Y contando con un jugador así, como se volvió a demostrar en el London Stadium del West Ham, será difícil para cualquier equipo de la Premier tener alguna posibilidad. El técnico local, Julen Lopetegui, lo admitía decepcionado: “Estamos frustrados. Hicimos cosas bien, pero no fue suficiente”.

Haaland marca todas las diferencias e impone su potencia a la mayoría de defensas, cuando está fresco, descansado y ágil como se le ve ahora. A juzgar por su precisión contra un West Ham abrumado, el internacional noruego parece decidido a dejar atrás su irregular forma de la temporada pasada y se dispone a batir todos los récords.

No disputar la Eurocopa con Noruega le ha ido muy bien. El propio Pep Guardiola destaca el cambio de su jugador, cuya ambición parece no tener límites. Y se permite bromear con la situación: “Es imparable. No hay defensa central, ni siquiera con una pistola, que lo pare”.

Haaland ya es el octavo ‘hat-trick’ del delantero del Manchester City en la liga inglesa, su segundo en semanas consecutivas, siete goles en sus primeros tres partidos, lo que subraya lo mucho que le ha ido bien un verano sin competir. Son 11 ‘hat-tricks’ con el City, 24 en su carrera, con su club y su selección, y 70 goles en la Premier League en 69 partidos.

Lo que llama la atención es el nivel de efectividad. Incluso leyendas de la Premier como Thierry Henry, Harry Kane o Michael Owen, que lograron el mismo número de ‘hat tricks’ de Haaland, tardaron mucho más tiempo que el ‘nueve’ del City. Henry logró la hazaña en 258 partidos, Kane en 320 y Owen en 326. La comparación habla por sí sola.

Haaland necesitará otros 190 goles para igualar el total de 260 del máximo goleador de todos los tiempos de la Premier League, Alan Shearer. Si se mantuviera su ritmo de 80 minutos por gol, necesitaría otras tres temporadas y media para coronarse como el mejor de todos los tiempos.

De momento, y, para preocupación de las defensas rivales, Haaland dice que después de un verano de descanso, se siente listo para establecer más récords, aunque advierte que los jugadores no pueden estar en forma “si juegan 70 partidos al año”.

El momento en Manchester es de satisfacción por la forma en que Haaland ha vuelto del verano. “Está jugando mucho mejor en todo”, ha admitido Pep Guardiola al ver los movimientos y efectividad del goleador del City. Su motivación para entrenar y mejorar también han conducido a ese cambio positivo.

Se ha visto a Haaland quedarse en las instalaciones media hora después de finalizar las sesiones, para hacer trabajo individual y admiten los cuidadores que durante la temporada pasada eso no ocurrió, porque siempre arrastraba molestias y se sentía cansado.

El récord actual de goles en una sola temporada son los 36 que estableció Haaland en la 2022-23. Con el segundo triplete del noruego, con el que suma ya siete goles en solo tres partidos de la Premier, va camino de superarlo.

Esta facilidad con la que el Manchester City encuentra los goles no augura demasiadas posibilidades a sus rivales, aunque el Liverpool de Arne Slot ha empezado con similar efectividad. Dos de sus mejores delanteros, Luis Díaz y Salah, están brillando en el inicio de la temporada y aceptando el ‘pulso’ con el City.

Con sus goles, los ‘reds’ también han sumado tres victorias y sin encajar ningún gol. El Arsenal también se ha conjurado este año para tratar de ser mejor y no fallar, pero, ya en el tercer partido, una ‘chiquillada’ de Declan Rice, al desplazar un balón cuando el defensa del Brighton, Joel Veltman, se disponía a sacar una falta, le costó una segunda tarjeta amarilla y la expulsión.

Los ‘seagulls’, que entrena ahora Fabian Hürzeler supieron aprovechar la superioridad para arañar un empate, que supuso el primer tropiezo del Arsenal en la carrera por el título. Aunque la decisión del árbitro al amonestar a Rice fuera muy rigurosa y mereciera las protestas de Mikel Arteta, el nivel de exigencia que se imponen los ‘gunners’ requiere la máxima concentración de los jugadores para no cometer pifias que luego se pagan con puntos.

Otra cosa es el nivel de los árbitros de la Premier y su falta de sentido común al aplicar las normas. Probablemente, la falta de Rice debió valorarse como lo que fue, una tontería, sancionable con el reglamento, pero, por la importancia del momento del partido que podía tener la expulsión, hubiera tenido el árbitro, Chris Kavanagh, que ser más flexible, cuando una segunda tarjeta amarilla deja a un equipo en inferioridad, y condiciona el resultado.

La empatía y el sentido común deberían formar parte también del código de conducta del arbitraje, porque la decisión de expulsar a Rice, por su desproporción, dio mala imagen a la liga inglesa.

Sin Rice y sin tener un goleador tan explosivo como Haaland tendrá ahora que competir el Arsenal en los próximos partidos y también, con la presión de no cometer más errores, por la efectividad del noruego. Sus exhibiciones presagian otro gran año al Manchester City, solo con dos nubes en el horizonte: la renovación de Guardiola, hoy en el aire, y la resolución de los 115 cargos por infracciones financieras del City, por saltarse las normas de la Premier.