En un movimiento que ha generado gran expectación en el mundo del fútbol, el Atlético Madrid ha dado un paso clave para fichar al joven delantero argentino Julián Álvarez. La clave de este posible traspaso se encuentra en una estratégica 'jugada' que el club colchonero ha llevado a cabo con el Chelsea, equipo inglés que hasta ahora parecía tener la sartén por el mango en la disputa por el jugador. Sin embargo, gracias a esta maniobra inteligente, el Atlético Madrid ha logrado abrirse camino y ahora se encuentra en una posición ventajosa para fichar al talentoso futbolista. ¿Cuál es el secreto detrás de esta operación y qué implica para el futuro del equipo rojiblanco?
Atlético y Chelsea unen fuerzas: la 'jugada' que permite fichar a Julián Álvarez
Conocido es que para que el Atlético de Madrid consiguiese cerrar el fichaje de Julián Álvarez necesitaba que saliesen adelante otras dos operaciones que había abiertas con el Chelsea, las que debían llevar a Conor Gallagher a la capital española y a Samu Omorodion a la inglesa.
Esto ha dado lugar a una maniobra financiera entre Atlético y Chelsea con la que ambos clubes han salido beneficiados en sus objetivos. La entidad inglesa tiene problemas con el fair play financiero y la venta de un canterano ayuda, y mucho, a cumplir con esta norma.
Lo dejó entrever hace días el propio entrenador del Chelsea, Enzo Maresca, aludiendo a esta regla como la razón principal para querer traspasar a su capitán Gallagher, que lleva en Stamford Bridge desde los ocho años y que es muy querido por la afición. Todos los clubes en este momento se ven obligados a vender jugadores de la academia debido a las reglas. Son problemas de todos los clubes de la Premier League. La intención del club no es vender jugadores de la academia, pero al final son las reglas las que te obligan a hacerlo. No somos solo nosotros, son todos los clubes de la Premier League, dijo el preparador italiano.
Pues bien, el Atlético buscaba centrocampista y el Chelsea, con el que hay excelentes relaciones, vio en Madrid el destino ideal para Gallagher, que gustaba mucho a la dirección deportiva colchonera. A cambio, el Chelsea tenía que fichar a Samu Omorodion, a quien los ingleses seguían desde hace meses, por algo más de 40 millones de euros. Una cantidad similar a la que desembolsarán en el Metropolitano por Gallagher, aunque el Atlético lo recibirá de golpe.
Y eso era fundamental para ir al Manchester City con el dinero por delante y que aceptasen la oferta por Julián Álvarez, que acabará costando unos 75 millones de euros más otros 10-15 en variables. Sin esta maniobra, el Atlético nunca podría haber acometido la operación que ya está cerrada para que Julián Álvarez sea jugador rojiblanco.
Ahora, Atlético y Chelsea se han ayudado mutuamente con estas operaciones. Los ingleses se quedan con Samu y ya no están asfixiados por el fair play y el Atlético tiene al medio deseado y además, dinero para poder fichar a Julián Álvarez.
La operación que cambió todo
La maniobra financiera entre Atlético y Chelsea ha sido clave para que ambos clubes consigan sus objetivos. El traspaso de Gallagher al Atlético y de Omorodion al Chelsea ha permitido que el club rojiblanco tenga el dinero necesario para fichar a Julián Álvarez.
Esta operación ha sido posible gracias a la excelente relación entre ambos clubes, que han trabajado juntos para lograr sus objetivos. Ahora, el Atlético tiene al jugador que necesitaba y el Chelsea ha resuelto sus problemas con el fair play financiero.
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