Jon Martín, dominante en su debut con el primer equipo

Jon Martín, dominante en su debut con el primer equipo

El joven delantero Jon Martín ha hecho historia en su debut con el primer equipo del club. Con una actuación electrizante, el jugador de 20 años demostró que su ascenso a la plantilla principal no fue una casualidad. Desde el principio, Martín se mostró decisivo en el campo, anotando un gol y ofreciendo varias opciones de peligro a sus compañeros. Su velocidad y movilidad fueron clave para desestabilizar la defensa rival y permitir que su equipo se llevara la victoria. La confianza que ha demostrado en su debut ha generado un gran entusiasmo entre los aficionados y el cuerpo técnico, que ya ven en él un futuro estrella del fútbol.

Jon Martín brilla en su debut con el primer equipo, clave en el gol txuri urdin

Jon Martín saltó al césped de Zubieta como titular en la Real por primera vez, jugando por la derecha. Fue clave en el gol txuri urdin, donde cruzó la línea divisoria, alzó la cabeza y filtró un pase a Goti para dejarlo solo ante el portero.

Comenzó acompañado de Zubeldia, que portó el brazalete de capitán. El de Azkoitia ocupó el lugar de Le Normand, dejando el flanco derecho al canterano, que jugó 66 minutos, el más de todo el partido.

Un arma en salida

Martín cogió los galones en salida de balón desde los primeros instantes, en los que intentó sus primeras diagonales. Una fórmula que repitió innumerables veces en los primeros 45 minutos, donde tuvo menos trabajo que tras el descanso. Con las constantes indicaciones de Marrero, que no le dejó relajarse en ningún momento, el de Lasarte se mostró convencido y contundente en los primeros duelos de partido.

Incluso con el balón a 50 metros de su zona de acción, Marrero siguió insistiendo en la concentración que exigía mantener al delantero croata siempre controlado, llamando la atención de su compañero de equipo en numerosas ocasiones: ¡Jon, no te va!, insistía el guardameta desde la lejanía.

Con todo un veterano al lado, el joven central del Sanse no dudó en encargarse de la salida de balón. Algo en lo que ayudó la tímida presión de Osasuna, más enfocada en tapar a Urko que en saltar al defensor. Este movimiento de los rojillos le permitió llegar al centro del campo con la cabeza siempre arriba, pisar el balón y entonces tomar la mejor decisión.

Fueron siete cambios de orientación los que intentó Martín, la mayoría de ellos con éxito, buscando primero a Javi López, para después combinar con Magunazelaia o Becker. Cabe mencionar que la precisión del central disminuyó considerablemente en los últimos minutos antes del entretiempo. No llegó a tiempo a la internada de Moi Gómez en el primer gol y poco más pudo hacer en el segundo.