- Desde los 15 años ganar Grand Slams y conquistar los cuatro estaba en mis planes, afirma [nombre del tenista]
- El secreto detrás de su éxito: ambición, competitividad y tranquilidad
- Un animal competitivo
- Eliminó los enfados
- Los cuatro 'majors' en su mente
- La mejor vuelta de su vida
- Alaba a su equipo
- También es inconformista
Desde los 15 años ganar Grand Slams y conquistar los cuatro estaba en mis planes, afirma [nombre del tenista]
En una entrevista reciente, el destacado tenista [nombre del tenista] reveló que su ambición de conquistar los cuatro Grand Slams se remonta a su adolescencia. Con solo 15 años, el joven deportista ya había trazado un mapa para alcanzar la cima del tenis mundial. Según sus propias palabras, ganar Grand Slams y conquistar los cuatro estaba en mis planes desde muy temprana edad. Esta declaración no solo demuestra la confianza y determinación del tenista, sino que también habla de su capacidad para planificar y trabajar hacia objetivos a largo plazo. ¿Cómo logró este joven prodigio hacer realidad sus sueños y qué lo llevó a alcanzar la cima del tenis?
El secreto detrás de su éxito: ambición, competitividad y tranquilidad
El brillante campeón del British Open 2024 en Royal Troon, Xander Schauffele, de 30 años, aparenta ser frío, educado y relajado, pero esconde una gran ambición y competitividad que lo han llevado a alcanzar dos Grand Slams en su palmarés.
Un animal competitivo
Le pueden preguntar a mi familia si soy competitivo o no. Quizá no vaya sacando puños por el campo o tirando palos, pero tengo fuego por dentro. De lo contrario no tendría ahora mismo dos Grandes en mi palmarés. Y os digo que el fuego está ahora mismo más vivo que nunca, afirma Schauffele, quien no oculta su pasión y determinación para seguir triunfando.
Eliminó los enfados
Cada vez que me enfadaba en el campo o dejaba salir la euforia, las cosas me iban muy mal. Es probable que vaya con mi carácter tranquilo de alguien nacido en el sur de California. Me van mejor así las cosas. Necesito tiempo y relajación para centrarme en cada golpe. Se hace más difícil si vas celebrando en exceso o quejándote de un mal golpe, explica el golfista, quien ha aprendido a controlar sus emociones para mejorar su juego.
Los cuatro 'majors' en su mente
Siempre ha sido un objetivo en mi vida. Desde los 15 años hablaba con mi padre sobre ganar Grand Slams y conquistar los cuatro también estaba en mis planes. Me costó una eternidad ganar el primero, ahora tengo dos y estoy un poco más cerca. Sobre mis opciones de hacerlo, yo estoy convencido, pero mejor les dejo a ustedes hablar sobre ello, dice Schauffele, con la mirada puesta en conquistar los cuatro Grand Slams.
La mejor vuelta de su vida
Esta de Troon es la mejor de toda mi vida. Nunca he jugado tan bien al golf. He seguido la misma estrategia del PGA. He decidido mirar todas y cada una de las pizarras de resultados para saber dónde estaba en la clasificación. Sin duda, ganar el PGA me ha ayudado en los últimos nueve hoyos de hoy. Tuve sensación de calma. Justo después del birdie del hoyo 14 ha sido cuando he empezado a pensar que podía ganar. No había hecho ningún birdie en un par 5 en toda la semana hasta el del hoyo 6. Justo después he dicho, ya hemos abierto la lata, ahora hay que hacerlo también en el 16, relata el golfista sobre su exitosa vuelta en el British Open.
Alaba a su equipo
Es de justicia. Somos un equipo de dos (respecto a su caddy). Sin Austin esto no sería posible. Todo mi equipo tiene parte de culpa de este Open. De hecho, el primero que va a beber de la Jarra es mi padre porque sé que le hace mucha ilusión, agradece Schauffele a su equipo y familia por su apoyo.
También es inconformista
No quiero ser negativo, pero hay muchas partes de mi trabajo que no me gustan. Lo que sí valor y es casi lo más importante para mí es la libertad de estar en el exterior. Es uno de los mejores trabajos del mundo. Puedes estar al sol. No tengo que sentarme en un escritorio. Soy mi propio jefe… la mayor parte del tiempo. Son libertades que no doy por sentadas y valoro mucho, concluye Schauffele, quien valora la libertad y flexibilidad que su trabajo le brinda.
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