El Masters de Augusta ha dado inicio con su primera jornada, uno de los eventos más destacados en el mundo del golf. En esta edición, los mejores golfistas del planeta se reúnen en el icónico campo de Augusta National para competir por el preciado chaqueta verde. Los aficionados al golf están expectantes por presenciar las habilidades y destrezas de jugadores como Tiger Woods, Rory McIlroy y Dustin Johnson, entre otros. La emoción y la competencia están en su punto más álgido en este torneo que representa la excelencia y la tradición del golf a nivel mundial. Los seguidores de este deporte estarán atentos a cada golpe, putt y estrategia que definirá al próximo campeón del Masters de Augusta.
Inicia el Masters de Augusta con retraso por condiciones climáticas
El Masters de Augusta se puso en marcha este jueves después de un retraso de dos horas y media con el viento todavía azotando bajo un cielo nublado, la primera vez desde julio en el British Open que los mejores jugadores de golf se han reunido en el mismo campo para el mismo torneo.
El seis veces campeón Jack Nicklaus se unió al tres veces ganador Gary Player y al dos veces campeón Tom Watson, mientras miles de aficionados rodeaban el primer tee para verlos dar los tradicionales golpes de apertura. Ahora no es tan fácil poner la bola en el tee, ¿verdad?, dijo Player, de 88 años. Erik van Rooyen y Jake Knapp fueron los primeros competidores en salir desde el tee del 1, mientras que los pesos pesados tanto del PGA Tour como del LIV Golf se repartieron en grupos destacados a lo largo del día.
Leyendas del golf se reúnen en el campo en primer día de torneo
Los espectadores pudieron entrar en el campo media hora antes de que se iniciara la jornada, retrasada a causa de las tormentas. Es el sexto año consecutivo que el tiempo ha retrasado al menos una jornada del Masters. Esta primera jornada concluirá este viernes. Hay 13 jugadores del LIV Golf, financiado por Arabia Saudí, en el campo este año, incluido el vigente campeón del Masters, Jon Rahm, que dejó el PGA Tour a finales del año pasado. Esta cifra es inferior a los 18 de hace un año, cuando nadie estaba seguro de cómo se resolvería en el Augusta National la ruptura entre la liga disidente y el PGA Tour.
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