El Athletic Bilbao vivió días de incertidumbre y confianza en el reciente curso
El pasado curso ha sido un verdadero rollercoaster emocional para el Athletic Bilbao. La temporada comenzó con grandes expectativas, pero pronto se vio envuelta en una nube de incertidumbre que amenazaba con desestabilizar la entidad. Sin embargo, gracias a la unidad y determinación de los jugadores y el cuerpo técnico, el equipo logró sobreponerse a las dificultades y terminar el curso con un sabor agridulce. A lo largo de este artículo, analizaremos los momentos clave que definieron la temporada del Athletic Bilbao y cómo logró salir adelante en medio de la adversidad.
Athletic Bilbao: Días de incertidumbre y confianza en el reciente curso
La derrota sufrida el pasado domingo en Montilivi ante el Girona ha generado un ambiente de incertidumbre en el Athletic Bilbao, que se va al segundo parón liguero de la temporada con dudas y certezas. La lesión de Sancet y la expulsión de Paredes son solo algunos de los episodios que han marcado el arranque de esta semana.
La lesión de Sancet
La noche de Montilivi fue un prefacio de lo que se le venía encima al propio Athletic. El navarro marcó el gol del empate provisional y tuvo que retirarse acto seguido lesionado. El parte médico emitido por el club indica que el jugador sufre una lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna izquierda. No se especifica el grado de la dolencia, solo que el futbolista queda pendiente de evolución.
Pendientes de Nico Williams
Nico Williams, por su parte, se incorporó a la concentración de la selección española con vistas a la doble cita de la Nations League frente a Dinamarca y Serbia. La presencia del extremo a las órdenes de Luis de la Fuente estaba en duda por la contusión en la zona sacroilíaca izquierda que le impidió desplazarse a Girona con su equipo. El bilbaíno, que habrá sido evaluado por los médicos de la Federación, permanecía a última hora de ayer concentrado con la Roja. Si hay algo, avisaremos, aseguraban desde la RFEF.
La roja a Paredes
Pulido Santana, árbitro del Girona-Athletic del pasado domingo, reflejó en el acta del partido que la primera amarilla mostrada a Paredes en Montilivi fue por sujetar a un adversario en la disputa del balón, haciéndolo de forma ostensible y persistente. Todo debió quedar en esa primera amonestación, pero el central del Athletic acabó viendo una segunda amarilla y la consiguiente roja por, tal y como reza el colegiado en dicha acta, hacer caso omiso a mis indicaciones, tras indicarle de forma continuada que se alejara de la zona donde se iba a efectuar un tiro de penalti. Valverde ya dejó claro que la expulsión fue a todas luces evitable.
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