Tomamos aliento y continuamos adelante
En un momento de gran incertidumbre y desafío, es fundamental que nos detengamos un instante y tomemos aliento antes de seguir adelante. La situación actual nos ha llevado a una encrucijada, donde la determinación y la resiliencia serán clave para superar los obstáculos que se nos presentan. Es hora de reconectar con nuestros objetivos y reafirmar nuestra compromiso con el futuro. En este sentido, nuestro equipo de trabajo se compromete a continuar adelante, con la convicción de que juntos podemos superar cualquier obstáculo y salir adelante más fuertes que nunca.
La Real Sociedad supera el test de la confianza y se impone al Valencia
El choque del pasado sábado entre la Real Sociedad y el Valencia se planteaba en unos términos tremendamente delicados, habida cuenta de las urgencias con que ambas escuadras llegaban al partido, igualadas en puntos, e instaladas peligrosamente en la zona baja, muy baja, de la tabla. Afortunadamente para la Real, será Rubén Baraja y su Valencia, quien deberá gestionar un escenario aún más deteriorado a la conclusión del encuentro.
Porque ganó la Real en casa, delante de su público, algo a lo que, increíblemente, nos habíamos desacostumbrado de un tiempo a esta parte. Hacía mucho tiempo que la Real no padecía los rigores derivados de una mala clasificación después de siete jornadas. Y la pregunta que todos nos hacíamos era cómo manejaría el equipo una tesitura semejante. Porque, inevitablemente, los nervios tenían que aflorar por algún lado.
Heridas abiertas
Después de una pretemporada que no había transcurrido como Imanol había delineado, por mucho que algunas variables podían ser previsibles, el equipo había arrancado la competición al ralentí, arrastrándose más que avanzando, sumando a duras penas, y proyectando una imagen altamente preocupante.
El buen comportamiento del grupo el día del Real Madrid, alivió de forma tenue la tensión, para volver a crecer tras los partidos de Mallorca y Valladolid. El debut europeo en Niza, propuesto a modo de viraje, cambio radical de dirección, tampoco resolvió las dudas emergentes.
En ese frágil marco se dibujó el partido frente al Valencia. Quien más, quien menos, se planteaba el escenario de una hipotética derrota y sus consecuencias. El entrenador, que había percibido el malestar en su entorno, había salido a la palestra para recordar que él era quien seguía con el remo de gobierno y al frente de la nave, por mucho que a algunos les pesara.
¡Qué bueno que viniste, Nayef!
Es curioso la cantidad de tiempo que solemos emplear en recordar el tiempo necesario para que un futbolista nuevo, procedente de otras latitudes, se adapte a los nuevos hábitos de su nuevo equipo. Y, de repente, llega un marroquí, procedente de la Premier para apuntalar de urgencia la defensa, y encaja desde el primer momento como un guante. ¿Quién dijo período de adaptación?
Prevenir ahora, no lamentar mañana
En unos pocos días hemos asistido a episodios deleznables protagonizados por espectadores en distintos estadios de fútbol del planeta. Es preocupante la escalada de incidencias de este tipo en los últimos tiempos, y, o se toman medidas urgentemente para atajarlas, o algún día, no muy lejano, podríamos estar lamentando pérdidas irreparables. Mañana llega el Anderlecht, y estamos avisados.
Finalmente, la Real Sociedad ha podido tomar aire y seguir adelante, derrotando al Valencia por un contundente 3-0. Un resultado que llega en un momento clave para el equipo, que puede ser el punto de inflexión para cambiar el rumbo de la temporada.
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